La Fundación Franco asumió la gestión del Pazo de Meirás con el ánimo de mostrar la "grandeza" del dictador. Mientras la oposición reclama a la Xunta que tome cartas en el asunto, el presidente del Ejecutivo gallego, Alberto Núñez Feijóo, asegura que no puede actuar en base a "opiniones" pero advierte que si su gobierno "tiene conocimiento" de cualquier acto de "apología de fascismo" lo denunciará. "Invito a cualquier persona física o asociación que ponga en conocimiento de la Xunta de forma probada ese tipo de consideraciones", avisó.

"Pero la ley no actúa en base a opiniones sino en base a actos tipificados que dan lugar a sanciones. Si hay algún acto que dé lugar a sanción estamos en condición de tramitarlo ante las autoridades judiciales", señaló Feijóo en su último Consello de la Xunta antes de cogerse a partir del día 14 una quincena de vacaciones.

Y, en todo caso, recordó que la Xunta ya tramitó una sanción a los dueños del Pazo de Meirás por incumplir la obligación de abrir al público el inmueble declarado Bien de Interés Cultural. En este sentido, recordó que fue su Gobierno el que exigió a la familia Franco que debía permitir las visitas "después de cuatro años de bipartito en los que no abría al público".

Feijóo desveló además que la Fundación Franco realizó diversos ofrecimientos a la Xunta para que cofinanciase la apertura al público de Meirás, desde cederle la gestión a la administración gallega a cambio de pagar su mantenimiento a conveniar un programa conjunto de actividades para las visitas.

"Lo único que hicimos fue decirle a la Fundación Franco que no a que la Xunta colaborase en la apertura del Pazo, que no a que la Xunta financiase su mantenimiento y no a actividades con la Fundación Franco", recalcó.

La reacción del PSdeG-PSOE no se hizo esperar. Los socialistas recordaron a Feijóo que fue el Gobierno de Touriño el que declaró Bien de Interés Cultural el Pazo de Meirás "con la oposición firme" del PP.

Por otro lado, en Marea e Izquierda Unida pedirán en el Congreso la expropiación del Pazo de Meirás y reclaman también la ilegalización de la Fundación Franco porque "venera a un fascista".

Desde la Fundación Franco, sin embargo, replicaron ayer que cumplen "escrupulosamente la ley" con el régimen de visitas. Su portavoz, Jaime Alonso, señaló en declaraciones a la Sexta que en el Pazo de Meirás "no se va a hacer un turismo homofóbico, de agresión o falsedad de la historia" sino que se va a hablar "de la grandeza de Franco", que según explicó está en sus "obras y en sus hechos".

Tras el Consello de la Xunta Feijóo abordó también el veto del Ministerio de Fomento a transferir la AP-9 y las críticas de la oposición acusándolo de "ir del ganchete" con el Gobierno al decir que "entendía" la negativa del departamento de Íñigo de la Serna. Preguntado sobre qué cambió desde que se aprobó en el Parlamento por unanimidad la demanda de traspaso de esta autopista hasta ahora, Feijóo señaló que "lo que cambió es que los socialistas y nacionalistas antes callaban y pagaban. Y ahora nosotros ni callamos ni pagamos", dijo en alusión a que el Gobierno ha asumido el coste de la rebaja de los peajes en la AP-9 y añadiendo que mantiene "su solicitud de transferencia" de esta vía.

Además rechazó, tal y como denunció la oposición, que la reforma de Lei de Saúde tenga una finalidad "mercantilista". Y apuntó que no cree que en Galicia se produzcan casos de turismofobia como en Cataluña o Baleares.