Abanca fue una de las entidades receptoras de los 9.000 millones de euros en depósitos que se esfumaron del balance del Popular en los meses de abril y mayo. Según recogen sus cuentas del primer semestre del año, los recursos captados de clientes aumentaron en 1.489 millones de euros en la primera mitad de 2017, hasta los 36.204 millones de euros, lo que representa un avance del 4,29% respecto al mismo periodo del año anterior.

Según reveló ayer en Vigo el presidente de la entidad, Juan Carlos Escotet, durante la presentación de resultados, su cuota sobre el mercado de depósitos en Galicia se elevó " dos puntos", hasta el 43%, gracias a la captación de 60.000 nuevas nóminas. Escotet prefirió no poner cifra al número de nuevos clientes llegados del Popular, aunque sí reconoció que "en la etapa final de Banco Popular hubo una cierta inestabilidad en sus depósitos y Abanca, al igual que otras entidades, fue percibida por el público como un banco refugio".

La entidad gallega cerró el primer semestre del año con un beneficio de 229,1 millones de euros. Se trata de una cifra un 23,1% superior a la registrada en el mismo periodo del año anterior. Juan Carlos Escotet, declaró sentirse "muy contento con los resultados", así como con la "relevante mejoría del ROE (rentabilidad sobre fondos propios)", que se instala por encima de la barrera del doble dígito, en el 11,4%.

Haz click para ampliar el gráfico

Las palancas sobre las que descansó esta mejora fueron la subida de tipos al crédito nuevo (al 2,01% frente al 1,77% que promedia su cartera) y la contención de sus gastos de explotación, que repuntaron un 0,6%, en un entorno en el que su volumen de crédito engordaba un 6%, hasta los 26.884 millones de euros.

En este sentido, el consejero delegado de Abanca, Francisco Botas, declaró que "el 61% de la nueva concesión de crédito va a parar a pymes y autónomos y un 22% al resto de empresas". La razón se encuentra en lo que Escotet denominó "un buen momento para invertir por la coyuntura económica favorable" .

Morosidad inferior al 6%

Además, la fuerte reducción de su stock de activos dudosos -se redujo un 23,7%, hasta los 1.865 millones de euros- ha permitido rebajar la tasa de morosidad de Abanca hasta el 5,61%. Escotet recuerda que, en el momento de la llegada del nuevo equipo directivo, "esta tasa superaba el 16%". La mora actual que registra Abanca es 2 puntos inferior a la registrada en al cierre del primer semestre de 2016 y que, además, se sitúa 2,4 puntos por debajo de la que marca la media del sector en España (8,05%).

En cuanto a la posibilidad de profundizar el ajuste de la red de sucursales, Escotet declaró que "todas las oficinas del grupo son rentables" y descartó ajustes adicionales. Además, puso a la red de oficinas como uno de los puntos fuertes, tras destacar que "diferencia" a Abanca frente a la competencia y que supone "una barrera de entrada".