La carrera para liderar el PSdeG se perfilaba como un pulso a dos entre el portavoz parlamentario, Xoaquín Fernández Leiceaga, y el militante vigués Gonzalo Caballero. Sin embargo, una tercera vía se abriría paso con los avales de la dirección de Pedro Sánchez, secretario general del partido, la gestora gallega, el aparato del partido en A Coruña y de gran parte de Lugo. Se trata del diputado coruñés Juan Villoslada, ajeno a la primera e incluso la segunda línea del partido.
A sus 52 años, Villoslada reconoció esta semana que medita dar el salto, el eufemismo usado por sus potenciales contrincantes para no revelar su intención hasta que esta semana la gestora anuncie la fecha de las primarias, previstas en principio para finales de septiembre.
El sanchismo apostaría por este licenciado en Derecho que fue gerente de la Universidade da Coruña entre 2012 y 2016. Antes había sido subdirector xeral de Administración Local en la Consellería de Xustiza y director de Servicios Generales, Hacienda e Interior en el consistorio herculino.
El respaldo de Ferraz a Villoslada marcaría una toma de posición respecto a Gonzalo Caballero, otro referente del sector que se impuso en las primarias estatales. La gestora ya sondea el apoyo territorial a la candidatura del diputado con reuniones en las que aprovecha para presentar a un desconocido en gran parte del territorio. De partida, contaría con el aval de Pedro Sánchez, pero también de la provincia de A Coruña, una vez que Valentín González Formoso, presidente de la diputación, descartó dar el paso. También los fieles en Lugo al exsecretario xeral José Ramón Gómez Besteiro verían con buenos ojos esta opción.
La gestora gallega ya ha sondeado, entre otros, al PSdeG de Vigo para conocer su posición ante las primarias de septiembre. Pero la agrupación viguesa, la de mayor número de militantes de la comunidad, mantiene en privado su discurso público: el sanchismo se impuso en las primarias y a este sector le corresponde tomar la iniciativa, por lo que se mantendrán de perfil sin interferir en el proceso. En el caso de Villoslada algunos barones del PSdeG siguen a la espera de escuchar su discurso y su proyecto. Solo entonces podrían dar algún paso, aunque de momento la mayoría se mantiene a la expectativa.
En este contexto, Leiceaga, cuyos apoyos orgánicos son todavía una incógnita, ensalza su propia experiencia frente a sus previsibles rivales en una "situación política compleja" como la actual. "Ahí puedo aportar algo más yo; tengo un grado de conocimiento que los otros dos precandidatos u otras personas no tienen", declaró en la Cadena Ser.
