Las comunidades autónomas dispondrán de una décima extra en el desequilibrio entre ingresos y gastos durante los dos próximos años, lo que supone retrasar a 2020 la norma para que el déficit público sea cero. Así lo aprobó ayer el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), que modifica el marco aprobado hace una semana y establece un tope del 0,4% para 2018 y del 0,1% para 2019. La Consellería de Facenda celebró el margen adicional que le aporta una decisión que le permitiría gastar el año que viene 60 millones de euros extra. En total, las autonomías podrán gastar 1.100 millones más.
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, convocó por sorpresa la reunión con las comunidades para relajar el planteamiento inicial de déficit, gesto con el que pretendía tender puentes con las comunidades del PSOE tras el anuncio de este partido de que votaría en contra del techo de gasto en el Congreso, lo que retrasaría el inicio de la elaboración de las cuentas estatales y autonómicas.
Los socialistas mantuvieron casi en bloque su rechazo al nuevo marco de déficit autonómico, que apoyaron el Gobierno central, las cinco comunidades gobernadas por el PP (Galicia, Madrid, La Rioja, Murcia y Castilla y León), Canarias, Ceuta y Melilla. Se opusieron Andalucía, Aragón, Asturias, Baleares, Castilla-La Mancha y Valencia, donde gobierna el PSOE solo o en coalición, pero Extremadura rompió esa unidad del puño y la rosa y se abstuvo alegando su defensa de la "normalidad institucional". El presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, apoyó a Susana Díaz en las primarias de su partido que venció Pedro Sánchez.
También se abstuvo Cantabria, mientras que los gobiernos de Cataluña, Euskadi y Navarra no acudieron.
El conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, justificó su apoyo a la propuesta del Gobierno porque "todo lo que sean facilidades para las comunidades autónomas es más que correcto", al tiempo que vinculó el cambio respecto a las cifras de la semana pasada en la actitud de un ministerio "un poco más proactivo" ante la mejora económica y que busca "facilitar las cosas a las comunidades autónomas".
Martínez añadió que confía en poder "utilizar toda la capacidad de financiación" adicional que le permite una décima extra de déficit para los dos próximos años -supondría 60 millones en 2018-, pero "siendo suficientemente prudentes" por la consolidación fiscal.
Además, el CPFF aprobó elevar cuatro décimas la capacidad de endeudamiento para el año que viene, fijada en el 24%, en el 23,1% para 2019 y en el 22,3% en 2020.
Las comunidades también recibirán 1.199 millones más respecto a la previsión inicial por las liquidaciones de 2015 gracias al mejor comportamiento de la recaudación, alcanzando 8.623 millones. A Galicia le corresponden 60,2 más hasta llegar a 427,9.
