El portavoz de En Marea, Luís Villares, justificó ayer el establecimiento en su formación de excepciones al tope de tres salarios mínimos -2.123 euros mensuales- para quienes perdiesen dinero al entrar en política, opción que incluye su nueva carta financiera, para emular las normas de socios como Podemos. "Es una propuesta consecuencia de ajustar la carta financiera originaria de En Marea a cartas de otras organizaciones, particularmente la de Podemos", expuso sobre un texto que deberá ser ratificado en el plenario del día 15.

Los problemas para cuadrar las exigencias de donaciones a los catorce diputados de En Marea con la de las organizaciones en las que algunos militan, caso de Podemos, causó la reforma del régimen económico inicialmente establecido en el seno de la segunda fuerza política de Galicia. Ahora se fija un tope de 2.213 euros -cifra que podría subir en 1.400 según las cargas familiares y de la que habría que descontar gastos-, pero se podrían permitir excepciones. "Estas condiciones podrán ser revisadas en el caso de lucro cesante que, con carácter irreversible, sufra la persona electa o por cargas económicas acreditadas", indica la norma.

Villares aseguró ayer a preguntas de la prensa que el texto calca un modelo habitual entre sus socios. "En Marea hizo un esfuerzo para adaptar su carta financiera a otros modelos para que fuesen más fácilmente compaginables. Esa era una cuestión que está directamente copiada de otras. Es común dentro del espacio de la confluencia y ruptura no solo gallego, sino federal, una cláusula de ese tipo", argumentó. Existe, sin embargo, un matiz, pues la norma interna de Podemos que prevé excepciones a los límites salariales las vincula, en el caso del lucro cesante, a quien sufra "un grave perjuicio". En la cúpula morada sentó mal la comparación planteada por Villares, según fuentes de la formación.

La pérdida de dinero provocada por el salto a la política ya generó polémica en En Marea. Villares solicitó una compensación económica por los gastos ocasionados entre julio y octubre tras renunciar a su puesto de juez -y a su sueldo- para ser cabeza de cartel de la formación en las autonómicas. También pidió chófer y un asistente.

La nueva carta financiera también reforma el sistema de donaciones al partido. Los diputados -o futuros cargos- aportarán el excedente del tope salarial al partido, pero "solo durante esta legislatura" podrán aportar la mitad de ese sobrante, distribuyendo el resto del "modo que consideren éticamente más justo". Esa vía aspira a solucionar el conflicto con Podemos, que reclamaba también parte de su sueldo a los siete de los 14 diputados de En Marea que forman parte de su organización. Sin embargo, cierra la puerta a repartir los 41.587 euros mensuales que recibe el grupo parlamentario.