Aunque el próximo 19 de noviembre se cumplen 15 años del hundimiento del Prestige y la catástrofe medioambiental que supuso el derrame de más de 64.000 toneladas del fuel empieza ya a quedar en el recuerdo, el peligro de que se repita la tragedia sigue ahí. El pasado año pasaron frente al litoral gallego 12.786 buques con mercancías peligrosas, un dos por ciento más que en 2015.

Es cierto, que se van a cumplir tres lustros sin que se haya producido un siniestro marítimo grave frente a las costas gallegas, pero no hay que olvidar que cada día circulan frente a Fisterra una media de 35 buques con mercancías peligrosas, según los datos de Salvamento Marítimo. Y lejos de reducirse el número, ha aumentado en los dos últimos años.

Como todos los sectores de la economía, el del transporte de mercancías por barco también sufrió los embates de las crisis. Desde 2009 hasta 2014, el tránsito de buques frente a las costas gallegas cayó todos los años y acumuló en ese periodo un descenso del 11,4 por ciento hasta los 35.979. Lo mismo ocurrió con los que llevaban materiales de riesgo, aunque la reducción en ese periodo fue menor, un 7% hasta los 12.495.

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Recuperación

Sin embargo, en los dos últimos años, coincidiendo con la tímida recuperación de la economía, se ha producido un incremento de los buques que doblan por Fisterra. Hay un 4 por ciento más de barcos pasando frente a las costas gallegas y un 2 por ciento más de los que portan mercancías peligrosas.

El pasado año, el dispositivo de separación de tráfico gallego identificó 101 buques de media al día, de los que 35, casi un tercio, transportaban mercancías peligrosas, en su mayoría hidrocarburos como los que llevaba el Prestige. Pese al crecimiento de los dos últimos años, el tránsito de este tipo de buques se sitúa en niveles de 2002.

El mayor número de naves que pasaron por Fisterra en las dos últimas décadas fue en 2000 cuando circularon 44.561, a una media diaria de 122. Sin embarco, el ejercicio en el que más barcos con materiales de riesgo navegaron frente a las costas gallegas fue en 2007, un año antes de que arrancase la crisis, con 14.431, casi 40 de media al día.

La seguridad ha mejorado desde la catástrofe del Prestige que tiñó de chapapote más de 3.000 kilómetros de costa -se prohibió la navegación de barcos monocascos como era el petrolero que se hundió el 19 de noviembre de 2002 y se han alejado de las costas gallegas las rutas de navegación de estos buques- pero no hay que olvidar que en la última década han pasado más de 133.000 barcos con mercancías peligrosas frente a Galicia.

Desde 1991 se han producido en las costas españolas 135 accidentes con vertidos de hidrocarburos, 22 de ellos en la comunidad, según el Perfil Ambiental de España del Ministerio de Agricultura. El número de siniestros en Galicia supone menos de la mitad de los que ha habido, por ejemplo, en Andalucía (55) y casi la misma cifra que en Canarias (21). Sin embargo, de los 13 accidentes con mayores vertidos de la historia de España, ocho se han producido en aguas gallegas. El Urquiola, que en 1976 vertió 101.000 toneladas de petróleo a la entrada del puerto de A Coruña, tiene el récord.