Conducir bajo la influencia del alcohol o las drogas, circular sin permiso o ir a más de 110 km/h por una vía urbana son algunas de las conductas delictivas al volante que más de 344.000 gallegos, el 22% del censo de conductores, reconoce haber cometido en alguna ocasión. Estas actitudes influyen en las cifras de siniestralidad hasta el punto de que 300 personas al año pierden la vida en toda España por culpa de infracciones de otro automovilista: el 14% del total de fallecidos.

Galicia es, junto con Murcia y Baleares, la comunidad con mayor proporción de automovilistas condenados en sentencia por delitos contra la seguridad vial, con más del 1,5% del total de conductores en los tres casos, según los datos del estudio Delitos y criminalidad vial en España. Evolución de la delincuencia contra la seguridad vial (2012-2015) de la Fundación Línea Directa. En el lado contrario, se sitúan Cantabria, Extremadura y Aragón, con índices muy inferiores al 1,3% que registra la media nacional.

Ponerse al volante después de ingerir bebidas alcohólicas o sustancias estupefacientes y circular sin carné son los dos delitos más habituales de los conductores gallegos. Otro estudio pionero del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) y la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil ya revelaba que uno de cada tres conductores responsables de accidente mortal en Galicia había dado positivo en alcohol o había consumido estupefacientes. El porcentaje se eleva hasta el 45% si se tiene en cuenta también la ingesta de psicofármacos. En el caso de los siniestros mortales de motocicletas, el 44% de los fallecidos o heridos responsables dieron positivo en alcohol.

Más de 615.000 automovilistas -cuatro de cada diez- ignoran que pueden ir a la cárcel por una infracción relacionada con la seguridad vial y casi 680.000 -el 45%- desconocen que dar positivo en el narcotest puede provocar también su ingreso en prisión. Pese al desconocimiento, nueve de cada diez gallegos está a favor de mantener las penas de cárcel en estos delitos y un 16% incluso por endurecerlas. Además, la mayoría aboga por incluir también como delitos llevar a los niños en el coche sin sistema de retención infantil, conducir sin seguro, manipular el teléfono móvil mientras se circula y cualquier positivo en alcohol, con independencia de la tasa. En el primer caso, la cifra de gallegos es del 68%, el porcentaje más alto de toda España.

El informe de Línea Directa analiza más de 580.000 juicios en España contra la seguridad vial y 450.000 condenas entre 2012 y 2015. Más de un tercio de los delitos son contra la seguridad vial, proporción que en Galicia supera el 40%. En las cárceles españolas hay más de 1.200 presos que cumplen pena por superar la tasa de alcohol permitida o conducir sin permiso.

Un hombre entre 41 y 50 años que da positivo en la prueba de alcoholemia y en el narcotest o sin carné responde al perfil de condenado por delitos de seguridad vial, pero solo reconocen que los cometen jóvenes entre 18 y 24 años que, además de las infracciones anteriores en algunos casos, admiten circular a más de 200 kilómetros por hora.