Aunque el grueso de los aspirantes a entrar en la universidad proviene de 2º de Bachillerato y tiene 18 años, una tercera parte de quienes se enfrentaron a las pruebas el año pasado ya contaba con al menos 19 años, según los datos de Educación, que indica que de los 13.870 matriculaciones registradas en las pruebas de acceso a los campus genéricas superaban los 18 más de 4.500.

Quienes llevan ventaja absoluta sobre sus compañeros son las mujeres, lo que augura que la feminización de la universidad proseguirá. De las 11.189 inscripciones realizadas en junio, ellas supusieron 6.573, casi el 59%. Pero si solo se analizan los exámenes de septiembre, es decir, aquellos a los que acudieron los que suspendieron en junio o que tenían pendientes materias, ellas siguen siendo mayoría, pero menos, ya que en esta convocatoria suponen el 53% de los candidatos.