Galicia tendrá que ponerse las pilas para adaptarse a las directrices marcadas por el Gobierno y la Unión Europea, que obligan a la Xunta a multiplicar por diez el reciclaje de basura en solo tres años. Ya en 2013 la UE había reprochado a la comunidad autónoma el bajo porcentaje de basura que reciclaba. En la actualidad solo el cinco por ciento de los desperdicios que llegan a Sogama son recuperados y reutilizados. El Plan de Xestión de Residuos, aprobado en 2011, fijaba ya entonces un objetivo ambicioso: incrementar este porcentaje hasta el 30 por ciento. Sin embargo, la aprobación del Plan Estatal Marco de Residuos (PEMAR) por parte del Gobierno obliga a las comunidades a llegar al 50 por ciento de basura reciclada en 2020. Esto ha obligado a la Consellería de Medio Ambiente a revisar su plan e incrementar en 20 millones la inversión inicialmente prevista -que correrá a cargo de Sogama- para construir dos plantas más: una de compostaje, que se sumará a las once ya previstas, y otra de envases ligeros, de manera que Galicia cuente con un total de dos para la selección y recuperación de plásticos.
El camino para llegar a ese reciclaje del 50 por ciento de basura parece todavía lejano. "A nosotros nos llegan 800.000 toneladas, de las cuales hablamos de un reciclaje del 5 al 6 por ciento", explica el director de Sogama, Javier Domínguez Lino. Esto significa que se recuperan casi 50.000 toneladas de la bolsa amarilla (envases ligeros) y la negra (donde va la materia orgánica y otros residuos). Y el objetivo que fija el Gobierno en su plan marco es que en 2020 se reciclen 583.957 toneladas de basura del total de 1,1 millón de desperdicios que se estima se generarán en 2020.
El principal reto está en recuperar la materia orgánica mediante su transformación en compost (abono), que es donde Galicia está más verde. En un principio, la Xunta se planteaba recuperar el 25 por ciento de estos residuos, pero ahora las nuevas exigencias europeas y estatales le obligará a duplicar este objetivo hasta el 50 por ciento.
¿Y cómo conseguirá la Xunta alcanzar esta meta? El Plan de Xestión de Residuos preveía construir once plantas de reciclaje. Pero no serán suficientes. La Consellería de Medio Ambiente ha revisado el documento y ha incluido en su planificación otra planta más, con capacidad para tratar 7.000 toneladas más al año. Su ubicación, al igual que las del resto de centrales, aún no está definida, pero su coste será de 10,1 millones de euros, que no correrán a cargo de las cuentas públicas, sino de Sogama, que tiene capital privado.
Pero también tendrá que incrementar el porcentaje de envases ligeros que recicla. La previsión inicial de la Xunta era construir una planta de selección de este tipo de residuos y, de hecho, es una de las obras incluidas en la ampliación que está acometiendo Sogama en sus instalaciones. Sin embargo, con las nuevas directrices estatales esto no será suficiente y el Gobierno gallego deberá impulsar otra planta de envases ligeros con capacidad para tratar 5.000 toneladas y que tendrá un coste de nueve millones de euros.
De esta manera, la nueva planificación de residuos costará 317,1 millones de euros, veinte millones más de lo previsto en un principio.
