Después de que el portavoz parlamentario de En Marea, Luís Villara defendiera que la confluencia no es contraria a que la cadena pública gallega televise misas por la función normalizadora que posee su emisión en gallego, la secretaria xeral de Podemos Galicia, Carmen Santos, apoyó la eliminación de los espacios religiosos de los medios públicos si su programación no proporciona un trato igualitario a todos los credos.

En declaraciones a este medio, la líder de Podemos en la comunidad, señaló que si en la parrilla de la TVG no están incluidas todas las religiones, entonces no lo debe estar ninguna: "En estos momentos, en los que solo hay espacios para la religión católica, estos no tienen cabida en los medios públicos. Si no se trata por igual a todas las confesiones, estamos a favor de que se eliminen estos contenidos".

Las declaraciones de Santos, -quien insistió en que Podemos Galicia, al igual que En Marea, defiende "la laicidad en los medios públicos"- se producen después de que Villares afirmara ante los micrófonos de varios medios que su grupo parlamentario "está totalmente de acuerdo" en que "las confesiones puedan tener espacios en los medios de comunicación públicos", siempre que estos estén regulados y siempre que "ningún tipo de favor hacia ninguna confesión.

Villares, que trató de matizar su postura inicial subrayando que lo fundamental para la confluencia "es acabar con los privilegios de la Iglesia católica" -en relación a su exención en el pago del IBI y al financiamiento público de los profesores de religión-, volvió a señalar la importancia de la lengua propia en las emisiones religiosas de la TVG dada "la gran asintonía" existente entre la ciudadanía que habla gallego y acude a las iglesias y el idioma en que se expresa la jerarquía eclesiástica.

Necesidad de debate

Sobre la posible presentación de una iniciativa en el Parlamento gallego en la línea de la registrada por la bancada parlamentaria liderada por Pablo Iglesias en Madrid, Santos señalóque En Marea cuenta con su propia agenda política. "Seguimos la misma línea estratégica y programática que la del grupo confederal de Unidos Podemos, del que formamos parte, peroen Galicia tenemos nuestros propios tiempos. No porque ahora la presenten ellos la tenemos que presentar nosotros".

Además, aunque la secretaria xeral de Podemos Galicia considera que este es un buen momento para plantear "el necesario debate sobre la relación entre los medios públicos y la religión" cree que que esta iniciativa "ya fue presentada por AGE" y, que, por tanto, "no sería ninguna novedad".

La mencionada propuesta, registrada en marzo de 2013 a petición del diputado de Esquerda Unida, Juan Manuel Fajardo, instaba a la Xunta de Galicia y al Consello de Administración de la CRTVG "a suspender las emisiones de programas religiosos y retirar de la programación la misa dominical". A través de unos argumentos muy semejantes a los que ahora maneja Unidos Podemos para sostener su postura en Madrid, la proposición no de ley sostenida por AGE, indicaba que las emisiones de contenidos religiosos en la CRTVG no guardan la equidistancia y criterios de igualdad con todas las confesiones religiosas que serían "deseables" en los medios públicos de un Estado aconfesional.

Además, el texto presentado por el conglomerado de partidos,liderado entonces por Xosé Manuel Beiras, c onsi deraba que los programas dedicados a la religión católica en la te levisión pública gallega suponían "un claro acto evangelizador" realizado con fondos públicos, mientras que "los colectivos pro laicismo no disponen de ni un solo segundo en las cadenas públicas gallegas".

Según datos de audiencia facilitados por la CRTVG, correspondientes al domingo 5 de marzo, el programa "A Santa Misa", en pantalla semanalmente desde 1985, registró un share del 9'3%. Ese día, durante la media hora que dura su emisión, la TVG fue el canal generalista más visto en Galicia.