El comprobante de una transferencia bancaria de 5 millones de euros desde Panamá, realizada por Constructora Internacional del Sur, empresa utilizada supuestamente por la constructora brasileña Odebrecht, para pagar sus sobornos a políticos de Latinoamérica, a una cuenta en Singapur en el Banc Pictet and Cie Ltd a nombre de la sociedad Vivosant Corporation, con domicilio en Pontevedra, fue una de las pruebas que precipitaron en noviembre del año pasado la orden de detención firmada por un juez de Brasil para el abogado Rodrigo Tacla Durán, el socio único de la firma con sede virtual en Pontevedra y a quien se le presenta como uno de los cerebros del entramado para ocultar las mordidas a políticos de doce países latimoamericanos de la trama Odebrecht. Estaba al frente del Departamento de Operaciones Estructuradas de la empresa, más conocido como Departamento de las Propinas. Era una estructura compleja y sofisticada para el pago de mordidas a políticos a cambios de adjudicaciones de obras públicas y el lavado de dinero.

El juez también ordenó el bloque de las cuentas con 5,5 millones de euros de Tacla Durán, quien fue arrestado días después en Madrid, a donde huyó desde Estados Unidos, confiando que su doble nacionalidad dificultase su extradicción a Brasil. El letrado de Tacla Durán negocia con las autoridades españoles evitar el viaje de su cliente a Brasil a cambio de información sobre firmas españolas también implicadas en casos de corrupción.

El comprobante de los 5 millones enviados a una cuenta asiática de la empresa con oficina virtual en Pontevedra era un archivo adjunto de un correo electrónico enviado desde una dirección de Odebrecht a Fernando Migliaccio da Silva, otro ejecutivo de la constructora brasileña y detenido ya en febrero del pasado año por ser quien presuntamente controlaba las cuentas bancarias suizas desde las que Odebrecht pagaba parte de sus sobornos. Investigando a los directivos de la firma de construcción, en el epicentro de una de las mayores redes de corrupción de Latino América, llegaron hasta Rodrigo Tacla Durán y la firma que registró en Pontevedra. A la cuenta en Singapur de la firma pontevedresa no habrían llegado solo los 5 millones a los que se alude en el correo electrónico. En septiembre de 2010 esa cuenta de Singapur a nombre de Vivosant Corporation recibió 12,7 millones de dólares procedentes de la tapadera panameña de Odebrecht.

Rodrigo Tacla aparece como socio y administrador único de Vivosant Corporation, creada en la ciudad de Pontevedra y cuyo domicilio es una oficina virtual en un centro de negocios. Esta firma, con sede virtual en la urbe del Lérez y que supuestamente se dedica a servicios de consultoría y proyectos de reciclaje industrial y construcción civil, y que no tiene movimientos desde 2013, sería, según informa la prensa latinoamericana, una de las empresas offshore controladas por Tacla Duran y usadas para el pago de sobornos. Tacla Duran controlaba doce cuentas bancarias ligadas a estas firmas, y desde ahí, canalizaba el pago de mordidas a los políticos. El abogado que eligió Pontevedra para ubicar a una de sus firmas tapaderas está acusado de blanquear con otro abogado Adir Assad 15,6 millones de euros.