La Consellería de Educación e Cultura se reunirá mañana con los sindicatos para desvelar sus planes respecto a las oposiciones anunciadas para este año, bloqueadas la semana pasada por el Ministerio de Hacienda hasta que se aprueben los presupuestos generales de 2017, en los que se establece la tasa de reposición, es decir, el porcentaje de vacantes que pueden cubrirse.

Los sindicatos denuncian la incerteza del proceso y reclaman "seguridad jurídica", mientras la oposición lamenta lo que entiende como uso político de las pruebas por parte del PP. De hecho, apela a la libertad para convocar las pruebas aplicando la tasa de reposición del año pasado, que fue del 100% para educación y sanidad.

El viernes pasado, el conselleiro de Educación, Román Rodríguez, aseguró que ya tienen listo un borrador de orden para lanzar las pruebas siempre que reciban autorización por parte del Ministerio de Hacienda. Un día antes, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, fijó como fecha límite mediados de abril para poder convocar las oposiciones con el tiempo suficiente para que los profesores se incorporasen a partir de septiembre, mes de inicio del curso lectivo.

El propio Feijóo abrió la posibilidad de convocar las 1.112 plazas anunciadas con la tasa de reposición del 2016, pero no concretó si usará esa vía. Apeló a la oposición, especialmente al PSOE pero sin citarlo, para que evite un "bloqueo" a las cuentas que afecte al empleo público.

El presidente gallego también extendió el bloqueo a las plazas en los servicios sanitarios. La Xunta pretendía sacar a oferta más de 1.600 plazas, que se reducirían a 800 con la tasa de 2016, si bien no ha especificado su optará por esa vía sin la luz verde de Hacienda.

Ante este escenario, la Xunta prevé anunciar mañana su postura o al menos comparecer ante los medios para revelar el contenido de la reunión con los sindicatos.

Doce comunidades, incluida Galicia, habían convocado ya más de 8.600 plazas en su cuerpo docente para este año.