El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, advirtió esta mañana de que las oposiciones de educación peligran si no se aprueban los presupuestos generales del Estado antes de mediados de abril. A partir de entonces, Galicia carecerá de margen para realizar las pruebas necesarias para que personal pudiese tomar posesión de su plaza antes del inicio del curso 2017-2018. Tampoco podría convocar los 1.600 puestos en sanidad. En ambos casos, las plazas se reducirían a la mitad.

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, encendió ayer las alarmas al comunicar a las comunidades que las ofertas públicas de empleo en materia de educación anunciadas quedaban condicionadas a la aprobación de los presupuestos de 2017. De momento, el Ejecutivo de Mariano Rajoy funciona con las cuentas prorrogadas del año pasado.

Feijóo achacó los problemas potenciales al "bloqueo" político que ya provocó que el Gobierno sumase casi un año en funciones. Si un nuevo presupuesto, las comunidades deberán ceñirse a la tasa de reposición vigente en 2016, es decir, el porcentaje máximo de plazas de personal que se jubila que se pueden reponer. En ese caso, en lugar de 1.600 plazas en sanidad, Galicia convocará la mitad, anunció Feijóo. Lo mismo sucederá con las 800 en educación anunciadas.

Con ese argumento, Feijóo descargó la presión sobre el PSOE, que ya facilitó la investidura e Rajoy, para aprobar los presupuestos estatales. Lo hizo aprovechando las críticas de los socialistas gallegos a la falta de estabilidad laboral en Sanidade. "Cuando hablan de buscar más estabilidad en el empleo público, que la faciliten", reclamó sin citar al PSOE.