Mientras en A Coruña encallaron las negociaciones para el presupuesto, en Santiago se encuentran prácticamente cerradas. El alcalde compostelano, Martiño Noriega (Compostela Aberta), celebró ayer el previsible apoyo a las cuentas para 2017 del Bloque, lo que garantizaría su aprobación, como una "respuesta a un esfuerzo que no fue menor", declaró en alusión a las negociaciones de las últimas semanas.

El propio BNG reconoció su "alto grado de satisfacción" en las conversaciones con uno de los tres gobiernos urbanos rupturistas de A Coruña. A pesar de ello, se mantiene la situación de rechazo de los nacionalistas a integrarse en el gobierno municipal, pese a que Noriega los invitó a ejecutar proyectos incluidos en las cuentas de forma conjunta.

Aunque carece todavía de fecha para el pleno en que se aprobarán las cuentas, Noriega se perfila como el primero de los tres citados gobiernos "del cambio" que podrá dar luz verde a sus proyectos económicos de forma pacífica, tras las crisis en A Coruña y Ferrol.