Galicia acogió a lo largo de 2016 a un total de 88 personas refugiadas de las 1.600 que llegaron a España en ese período y "próximamente" recibirá "más", que se instalarán en Lugo y otros puntos de la comunidad. Así lo indicó ayer en comisión parlamentaria el director xeral de Inclusión Social, Arturo Parrado, después de que la diputada de En Marea Luca Chao señalase lo que considera "el fracaso" de la UE ante la situación de "los que huyen del hambre y de la guerra".

La diputada rupturista denunció que son "miles" las personas que se ven obligadas a dormir "al raso" soportando temperaturas bajo cero y los niños que están "abandonados sin que nadie haga nada". Enfrente, lamentó, "muros de la vergüenza, restricción de la libre circulación de personas, detención de periodistas...".

Con la importancia de esta crisis humanitaria y la necesidad de "darle respuesta" coincidió, según informa Europa Press, el alto cargo de la Xunta, quien destacó la "rapidez" con la que actuó el Gobierno gallego y el carácter "solidario" de nuestra tierra. Hasta el punto de que lamentó que Galicia no haya podido acoger por el momento a "más" refugiados. El porcentaje acogido por Galicia sería del 5,5% de los que llegaron a España, aunque su población con respecto al total del país es similar, del 5,8%.

No obstante, Parrado avanzó que pronto llegarán más personas en estas circunstancias a España. En concreto, indicó que en "próximas semanas" vendrán otras 1.800 personas procedentes de Grecia, Italia y Turquía y que algunos de ellos -no concretó la cifra- tendrán en nuestra comunidad su destino.

En cuanto a la atención que reciben, Parrado aseguró que en una primera fase se les ayuda con los trámites necesarios y se les da una vivienda y cobertura económica, sanitaria, educativa y de los servicios municipales. La segunda fase, medio año después, busca que se integren y pasen a ser, dijo "Unos gallegos más". Durante año y medio se les ofrece orientación y se intenta conseguir su inserción laboral.