El vigués Javier Dorado fue nombrado ayer por el Consejo de Ministros director general del Instituto de la Juventud (Injuve). Licenciado en Derecho y exdiputado autonómico, Dorado se pone al frente del organismo que promueve políticas y actuaciones en favor de los jóvenes. Asume la nueva responsabilidad que le llevará a Madrid una semana después de que Elena Muñoz apostara por él como secretario general del PP de Vigo.
-¿Por qué es usted ideal para dirigir el Injuve?
-Soy joven y tengo experiencia en la política juvenil. Empecé siendo delegado de clase, recogiendo firmas para la salvación del lince ibérico. Tuve una organización de universitarios, luego entré en NNGG, fui portavoz de Juventud en el Parlamento, ...
-¿Por qué se afilió al PP?
-Llegué a la política por Julio Anguita. Me gustaba su oratoria, su elocuencia, me generó interés, pero después me di cuenta que congeniaba en ideología con el PP. Soy un friki de la política.
-Casado a los 28 años, con una hija recién nacida y político profesional. ¿Representa usted a los jóvenes de este país?
-Y sigo estudiando. Es mi opción de vida.
-¿Qué ideas nuevas trae al Injuve?
-Es un organismo nacional que debe dar soluciones a la gente joven. Nuestros padres nos han dejado un país con menos oportunidades que las que tenían ellos. Vivimos peor que ellos y tenemos la ambición de dejar a nuestros hijos un mundo mejor.
-La mayoría de los jóvenes no piensa en el porvenir de sus hijos. Aún se está labrando su futuro. ¿Qué puede hacer el Injuve por ellos?
-El Gobierno debe apoyar a los emprendedores, con menos trabas burocráticas, y debe incentivar fiscalmente la contratación de jóvenes.Las consecuencias de la crisis han sido dramáticas para mi generación y el Gobierno quiere ayudarla a que no se quede descolgada.
-¿Opina igual que el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, que los jóvenes emigran por "amplitud de miras"?
-Al ministro le faltó tiempo para explicarse. Muchos jóvenes abandonaron el país para buscar un trabajo y eso es dramático. Hemos fracasado pero la situación se revertirá, y no quiero recordar que la tasa de paro juvenil más alta fue con Zapatero. España tiene una deuda pendiente con miles de jóvenes que abandonaron el país porque no les quedaba otra. Tenemos que pedirles disculpas.
-¿Alguna vez estuvo en el paro?
-Hasta hace dos horas estaba en el paro. Desde que dejé el escaño en el Parlamento de Galicia llevaba 5 meses sin trabajo. Mi mujer está en el paro.
-¿Y ha tenido trabajos que no fuesen cargos públicos?
-Fui comercial, azafato, organicé eventos y servía copas cuando estudiaba en la facultad.
-Su hija tiene 5 meses, y usted piensa compaginar su trabajo en Madrid con la secretaria general del PP de Vigo, ¿cómo va a compaginar su vida laboral y familiar?
-No puedo responder a la pregunta. Estamos en un debate familiar interno, pero por encima de mi trabajo, está mi familia.
-Se declara republicano, cuestionó la reforma de la ley del aborto de Gallardón, defiende el matrimonio homosexual, ...
-El PP se equivocó a leguas con el recurso contra el matrimonio homosexual, pero rectificó y la reforma de la ley del aborto tampoco prosperó. Si creo que mi partido se equivoca, se lo digo.
-¿Y se equivocó en su respuesta a la corrupción?
-En ciertos momentos no fue todo lo duro que debió ser y eso hizo que muchos votantes dejaran de creer en nosotros. Después impulsamos el mayor paquete de medidas contra la corrupción.
-¿Y con los recortes ?
-El PP demostró tener una cabeza muy fría, pero le faltó temperatura en el corazón. Gobernó de forma perfecta para salir de la recesión, evitó el rescate, pero nos faltó sensibilidad en algún momento.
-¿Prohibiría el botellón?
-He practicado el botellón, pero seguro que no de menor.Los jóvenes no conocen los efectos dramáticos de la adicción al alcohol. Hay que trabajar en este campo, y entiendo que se deben prohibir los botellones con menores.
-¿Fumó porros?
-Ni un porro ni un pitillo. Soy antitabaco.
-¿Qué se propone hacer como secretario general del PP de Vigo?
-Mi reto es ayudar al PP a conseguir la alcaldía de Vigo.En las últimas municipales, tuvimos un resultado muy malo y tenemos que darle la vuelta. Nos quedan dos años para desarrrollar un proyecto político potente. Elena Muñoz está haciendo un trabajo espectacular.
-Ganó el congeso por 100 votos frente a Javier Guerra. ¿Cuál debe ser el papel del exconselleiro?
-Tras el Congreso, nos toca trabajar unidos. Nuestro rival es Abel Caballero. Guerra es un activo político del Partido Popular del que no podemos prescindir y pre siento que va a ser un puntal para ayudarnos a todos a recuperar la alcaldía.
-¿Qué tiene Caballero que hasta le votan los electores de centroderecha?
-Caballero hizo cosas bien, se merece un reconocimiento, pero su tiempo está acabado y la ciudad necesita un nuevo impulso.
