El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ratificó ayer en el Congreso su compromiso para concluir la construcción del AVE gallego, pero evitó dar plazos concretos a pesar que tanto el PSOE como En Marea le preguntaron por la marcha de las obras. "El Gobierno mantiene su compromiso inequívoco para poner en marcha cuanto antes este corredor porque es necesario para vertebrar el país", aseguró en su comparecencia en la comisión de Fomento del Congreso para exponer las líneas generales de actuación de su departamento.

Sin embargo, no quiso hablar de fechas una vez que el propio ministro reveló hace dos semanas -en su visita a Galicia- que había retrasos en 18,5 kilómetros del AVE gallego repartidos en cinco tramos que le impedían ratificar el año 2018 como el plazo para la conclusión de la línea de alta velocidad, eso sin contar con los 17,5 kilómetros de acceso a Ourense, un tramo que no se terminará hasta 2021 0 2022, ya que ni siquiera está licitado.

En todo caso, el ministro indicó que en enero se volverá a reunir con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para intentar fijar un nuevo calendario. "En esa reunión le expondremos cómo hemos ido resolviendo los tramos comprometidos desde el punto de vista técnico", comentó. También reafirmó su voluntad de "continuar con la propuesta que ya existía" en el diseño de la vía de acceso a la ciudad de Ourense, sobre la cual la pasada semana había reflexionado que quizás había que replantearse su construcción pues cuesta 600 millones de euros y solo permitirá ahora 4 minutos de viaje, y a lo mejor resultaba más lógico acondicionar la vía actual. Sin embargo, ante la presión ejercida de Galicia, al día siguiente el Ministerio de Fomento rectificó y anunció que seguía con el proyecto original.

Esas fueron las única palabras de De la Serna sobre el AVE gallego en la comisión de Fomento a pesar de que había una pregunta concreta por parte de En Marea que ya figuraba en el orden del día de la comisión, y de que el PSOE insistía en saber cómo iba a quedar. "El AVE gallego ni está ni se parece al diseño original y además se han dejado de ejecutar 1.000 millones de euros", censuró el portavoz socialista, César Ramos.

Con carácter general, pero sin referirse explícitamente a Galicia, el ministro declaró que no era partidario de dar plazos sobre el AVE que no pudiera garantizar al 100%, pero quiso dejar claro que no es por falta de recursos económicos para ejecutar las obras, sino por dificultades técnicas que aparecen y que en algunos casos derivan también en problemas administrativos.

En el caso de la comunidad gallega, de los cinco tramos con dificultades, en cuatro ya se ha llegado a acuerdos con las empresas para que retomen las obras, pero ahora se trata de determinar cuánto tiempo se van a prolongar los trabajos por encima del plazo de 2018.

Félix Alonso Cantorné -portavoz del grupo confederal, a través del que En Marea ha planteado sus cuestiones - preguntó también sobre las causas del accidente de O Porriño del pasado septiembre, pero el ministro -al que plantearon decenas de preguntas referentes a todas las comunidades- no respondió.

Sí lo hizo en cambio con la demanda de traspasar a Galicia la titularidad de la autopista AP-9, una reivindicación en la que ayer insistieron En Marea y el PSOE. El ministro reiteró que no habrá transferencia, ya que "forma parte de la red del Estado" y que el Gobierno es partidario de "mantener la titularidad" sobre toda la red para responder a las necesidades de vertebración del territorio y "garantizar las conexiones internacionales". No se trata de una cuestión "política", esgrimió, sino de "los requisitos que marca la ley".

Insistió en que la vía pactada con Galicia es que la Xunta participe conjuntamente con Fomento en la toma de decisiones que afecten a la gestión y a las inversiones de la AP-9. En este sentido, De la Serna avanzó que precisamente esta semana la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, se desplazará a Madrid para articular el mecanismo por el que la Xunta colaborará en la gestión de la autopista de peaje que cruza Galicia.