La designación de los delegados territoriales de la Xunta y el director de gabinete de Presidencia provocará cinco sustituciones en las filas del grupo parlamentario del PP. A Coruña y Lugo acaparan las novedades en cuanto a la estructura territorial, en la que repetirán Ignacio López-Chaves como delegado en Vigo; José Manuel Cores Tourís, en Pontevedra; y Marisol Díaz Mouteira, en Ourense. En A Coruña asume el puesto el actual alcalde de Boqueixón y ex director xeral de Xuventude, Ovidio Rodeiro, que debuta en una responsabilidad a la que regresó el año pasado Diego Calvo, presidente provincial del partido y ahora vicepresidente del Parlamento. En Lugo se estrenará José Manuel Balseiro, próximo a la líder de la formación popular en la provincia, Elena Candia. Esta derrotó en la pugna por la dirección del partido a la anterior delegada de la Xunta, Raquel Arias, que ejerce ahora de secretaria en la Mesa del Parlamento, precisamente órgano en que trabajó Balseiro los últimos años.

Rodeiro es el único sin asiento en la Cámara. El resto será sustituido, en principio, por Silvestre José Balseiros y José Alberto Pazos Couñago, en el caso de Pontevedra; aunque el primero también podría relevar a Irene Garrido en el Congreso y el segundo, repetir como alto cargo de la Xunta, por lo que la lista seguiría avanzando; Daniel Vega en Lugo; y Antonio Mouriño en Ourense.

En A Coruña entrará María Ángeles Antón en sustitución de Álvaro Pérez López, de nuevo responsable del gabinete de Núñez Feijóo.

Rechaza la clave sucesoria

El presidente de la Xunta evitó ayer aclarar si los conselleiros mantendrán su acta de diputados, situación en que solo se mantuvo Alfonso Rueda, vicepresidente, la legislatura pasada. En este caso, podrían hacerlo algunos más, si bien Feijóo descartó que la decisión fuese tomada "en clave sucesoria".

Además, descartó relevar a Mariano Rajoy al frente del partido estatal. "Su sucesor es Rajoy, ya lo verán en unos meses", indicó en alusión al congreso de su partido. También vinculó a su "amistad" que el exministro José Manuel García Margallo lo señalase como su favorito personal para sustituir al actual presidente del Gobierno.