La ex secretaria de Estado de Presupuestos del Ministerio de Hacienda, la gallega Marta Fernández Currás, negocia su entrada en el sector privado. Según informa Europa Press, actualmente está en proceso de incorporarse a la estructura de EY (antes conocida como Ernst & Young), en el área de Sector Público, pendiente de cerrar los trámites oportunos para evitar incompatibilidades tras abandonar su cargo en el departamento de Cristóbal Montoro. El suyo es un nuevo caso de la polémica conocida como "puerta giratoria", en la que cargos públicos de alto nivel se pasan a la empresa privada en cuando cesan sus responsabilidades en la Administración.

Currás fue responsable en los últimos años de diseñar los presupuestos generales del Estado para rebajar el déficit público al ritmo marcado por la Unión Europea. Sin embargo, los objetivos no se cumplieron y España -junto con Portugal- estuvo a punto de ser multada por Bruselas por incurrir en déficit excesivo, siendo los primeros Estados miembros advertidos de sanción. No obstante, a pesar de librarse de la multa en el último momento, sobre España aún pesa la amenaza de que la UE le congele parte de los fondos comunitarios el próximo año por no ser capaz de corregir el desfase presupuestario.

Marta Fernández accedió a la Secretaría de Estado de Presupuestos desde la Consellería de Facenda de la Xunta, donde protagonizó el fiasco de la fusión de las cajas de ahorro al imponer la integración de Caixanova y Caixa Galicia pese a la oposición de la entidad financiera del sur de la comunidad y al fuerte rechazo que la operación suscitó en parte de la sociedad gallega. La fusión fracasó y tras ser nacionalizado en banco resultante, este tuvo que ser vendido.

En su empeño de casar a las dos cajas gallegas, Currás impulsó una ley en el Parlamento para obligar a la fusión. E incluso, para justificar la integración, vendió como due diligence -una auditoría exhaustiva- lo que al final se demostró que no era tal. Pagó un millón de euros por un "diagnóstico acelerado de la viabilidad" de la fusión que KPMG, su autor, confesó que no era "en ningún caso una auditoría". Ese informe, que no se hizo público en su totalidad, no recomendaba además el enlace de Caixanova y Caixa Galicia, a pesar de que Currás sostuvo en todo momento que el estudio concluía que la integración sí era "solvente".

Su paso de la Consellería al Ministerio de Hacienda se interpretó en su momento como la mejor salida posible que pudo buscar el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, tras el resultado de la integración de las dos cajas de ahorro gallegas.

Nacida en Vigo, es licenciada en Ciencias Empresariales por la Universidad de Santiago e inspectora de Hacienda e interventora del Estado. En su incorporación al Gobierno en 2011 tenía plaza como profesora asociada de Hacienda Pública y sistemas fiscales en la Facultad de Económicas de Santiago. Además, era una de los dos conselleiros del Gabinete de Feijóo que no tenía el carné del PP e incluso también colaboró con el Gobierno del socialista Pérez Touriño, en el que fue interventora general de Galicia, aunque dejó el cargo en junio de 2007, antes de finalizar la legislatura del bipartito.

Ahora, a los pocos días de su cese como secretaria de Estado, está negociando su incorporación a EY, un de las cuatro grandes consultoras de servicios profesionales del mundo, junto con PricewaterhouseCoopers, Deloitte y KPMG.

Quien también dará el salto al sector privado es el exsecretario de Estado de Hacienda y compañero de Fernández Currás en el Ministerio, Miguel Ferre, quien ha firmado un acuerdo de intenciones con la consultora de relaciones públicas y comunicación Burson-Marsteller para "trabajar juntos".