El concejal del BNG de A Illa, Carlos Otero, fue denunciado por su expareja por un presunto delito de violencia de género. Esto motivó que el viernes fuese detenido por la Guardia Civil, y que permaneciese en dependencias policiales hasta la mañana del sábado, momento en el que pasó a disposición judicial, quedando en libertad con cargos. El edil afirma que en ningún momento agredió a su excompañera, y que lo único que hizo fue agarrarla por los brazos en un momento de fuerte discusión en el que, según su relato, la mujer le había propinado varios manotazos y le amenazaba con golpearlo con un paraguas. Otero difundió a media mañana de ayer un escrito en el que afirma que con su denuncia, su expareja "lo único que consiguió fue hacerme pasar la peor y más humillante experiencia de mi vida, de un modo absolutamente injusto e innecesario".