Siete de cada diez médicos de Atención Primaria admite sufrir "más dificultad de la habitual" para prescribir tratamientos innovadores debido a los recortes presupuestarios. Es una de las conclusiones de la encuesta presentada ayer en el 38 Congreso de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen) que reúne hasta el sábado en Santiago a unos 4.500 profesionales.

El presidente de Semergen, José Luis Llisterri, comentó que le parece "injusto" que médicos de familia debidamente preparados "no puedan prescribir medicamentos" que se demostraron eficaces y de calidad por culpa de "un control economicista".

Esto explica que, según la encuesta, alrededor de un 90 por ciento de los médicos consultados considere que los recortes afectaron a la atención a los usuarios.

La principal queja de los facultativos de los centros de salud es el recorte en la dotación económica asignada a la Atención Primaria. El 68 por ciento cree que la disponibilidad de recursos empeoró con respecto al pasado año, mientras que un 27 por ciento estima que está igual.

En opinión de Llisterri, es necesario también incrementar los recursos para I+D+i en el ámbito de la Atención Primaria. El problema, según denunció, es que los presupuestos del Sistema Nacional de Salud están "a años luz" de los precisos para cubrir las necesidades asistenciales, docentes e investigadoras de los médicos de los centros de salud.

Así, recalcó que la labor de investigación "está poco reconocida" en la Atención Primaria y añadió además que hay "poca disponibilidad de tiempo" para realizar estas tareas. Para solucionarlo propuso facilitar el acceso de becarios que puedan ayudar a los médicos.