La Consellería de Educación ha abierto una inspección en los centros donde el pasado día 20 se celebraron referéndums contra las reválidas, solicitando información sobre la hora en qué se realizaron, si participaron profesores o quiénes fueron los organizadores. Para el sindicato CIG, que denunció esta actuación de la Xunta, se trata de la utilización de los inspectores "como si de un cuerpo policial se tratara" y de "prácticas antidemocráticas, autoritarias e intimidatorias".

El departamento de Román Rodríguez aclara que el servicio de Inspección simplemente está desempeñando su trabajo dentro de sus competencias, que es solicitar información "al tener conocimiento de una acción no prevista y, por tanto, desconocida para los inspectores", en referencia a la celebración de los referéndums, "para garantizar el buen funcionamiento de los centros y los derechos del alumnado".

Tras recordar que el recreo también es horario escolar -dado que las consultas se realizaron en este periodo-, Educación reclama información sobre el índice de participación de los estudiantes por cursos, el momento concreto de la votación, sobre la identidad de los organizadores, si participó el profesorado, el personal laboral o la dirección centro y en el caso de que hubiera llamamiento de los alumnos para ir a votar, qué personas facilitaron el listado con los nombres de los estudiantes.

Los referéndums fueron convocados por la organización juvenil Erguer. Estudantes de Galiza, en diferentes institutos de la comunidad.

La petición de información por parte de la Xunta ha sido duramente criticada por la CIG. "Es inaceptable y propio de una caza de brujas que la consellería utilice la inspección educativa para una actuación policial en lugar de dedicar el tiempo a otros cometidos. Estamos ante un salto cualitativo en la actitud represiva y autoritaria de la Xunta que busca acallar las voces críticas, que son mayoritarias, en contra de la Lomce y sus reválidas", reprocha el sindicato.

Precisamente, hoy los alumnos de los centros gallegos están llamados a la huelga contra la reforma educativa en una convocatoria impulsada por el Sindicato de Estudiantes en todo el Estado y apoyada por la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA).

La convocatoria cuenta con el apoyo, entre otros, de PSOE, Podemos y Esquerda Unida en Galicia y habrá concentraciones de protesta en las ciudades y principales villas.