Un mes. Ése es el plazo fijado por ley para que las administraciones pongan al día las facturas con autónomos y pequeñas empresas que realizan obras o prestan servicios en el sector público. Ni de lejos, los ayuntamientos españoles han logrado saldar las deudas con sus proveedores en el máximo de 30 días que establece la Ley de Morosidad. Según los últimos datos publicados por el Ministerio de Hacienda, el periodo medio de pago supera los 100 días -más del triple del plazo legal- en casi 400 de los más de 8.000 municipios españoles. Galicia no es una excepción. Y para los autónomos y pymes en la comunidad sigue siendo un auténtico quebradero de cabeza cobrar en plazo. Un total de 104 concellos hacen esperar más de la cuenta a sus proveedores. De ellos, un total de 48 están en las lista de los 500 municipios españoles con la tasa de morosidad más alta. O lo que es lo mismo, el 15% de los ayuntamientos gallegos están entre los más incumplidores de España en el pago de su deuda comercial.

Pese a la mejora de la situación financiera de las arcas municipales en el último año, tal y como reflejan los datos de ingresos e inversiones municipales de 2015 y la previsión para este ejercicio, el número de concellos que acumula facturas en sus despachos durante más de un mes aumentó en casi un 30%, al pasar de los 37 municipios de la comunidad que en junio del año pasado estaban en la lista de los más morosos de España a 48 en el último balance de Hacienda.

Casi la mitad de los ayuntamientos de la comunidad -un total de 141- se enfrenta a medidas correctoras y sanciones por parte del Gobierno central, bien por incumplir el plazo fijado por ley para pagar sus facturas o bien por omitir el balance a Hacienda. Son 104 los municipios gallegos que no pagan a sus proveedores en los 30 días que tienen como máximo, de ellos 62 doblan al menos el plazo legal y 41 hacen esperar a autónomos y pequeñas empresas entre tres meses hasta incluso más de dos años. Aquellas administraciones que de manera reiterada incumplen los plazos fijado por la Ley de Morosidad se enfrentan a la intervención de sus entregas a cuenta. Por el momento, la amenaza de Hacienda se materializó el pasado mes de abril en dos Ejecutivos autonómicos: Extremadura y Aragón, donde el Estado les ha retenido fondos del sistema de financiación para abonar directamente la deuda comercial.

El municipio que presenta los peores datos de toda España es Os Blancos (Ourense), que paga sus facturas a 844 días (dos años y cuatro meses). Otro municipio gallego, A Bola, también en Ourense, aparece como el segundo ayuntamiento de España que más tarda en poner al día sus facturas, 551 días. Cierra el podio La Sentiu de Sió (Lleida), con 466 días. Junto con las localidades ourensanas de Os Blancos y A Bola, otros 46 concellos figuran en los primeros 500 puestos de la tabla de morosidad comercial de las administraciones locales publicada por Hacienda.

Del casi medio centenar de ayuntamientos gallegos que más atraso arrastran en el pago de las facturas por obras y servicios, la provincia de Ourense concentra el mayor número (21). Le sigue A Coruña, con 14 municipios, Lugo con siete y cierra la lista Pontevedra con seis. Vilanova de Arousa, con una demora en el pago a sus proveedores de 277 días, es el concello de la provincia de Pontevedra que más tarda en saldar sus deudas; un balance que lo coloca en el puesto 69 del conjunto del Estado. A bastante distancia le siguen Moaña (338), Mondariz (363), Salceda de Caselas (380), Dozón (395) y Meis (436).

De las casi cien ciudades de más de 100.000 habitantes recogidas en el balance de Hacienda, destacan en la lista Vigo y Pontevedra, en el tercer y octavo puesto, respectivamente, de las urbes que antes saldan sus deudas comerciales. Por el contrario, es Lugo la ciudad gallega con los peores datos: 72,58 días de periodo medio de pago a sus proveedores, lo que la coloca como la décimo octava ciudad española peor pagadora. Le sigue de cerca Ferrol, en el puesto 24. Y a poca distancia, están Ourense, en el puesto 34, y A Coruña, en el 36.

En el ámbito de las comunidades autónomas, Galicia, con 17,25, se mantiene entre las ocho autonomías que pagan en plazo.