La Consellería do Medio Rural anunció ayer que agilizará la cesión a los concellos de fincas integradas en el Banco de Terras de Galicia que no son aptas para el uso agrario. La Xunta calcula que en torno a dos mil terrenos podrían pasar a manos de los municipios con un "fin social y en interés" de los vecinos. El objetivo, según la Administración, es dar uso a unas propiedades que no se pueden explotar debido a que tienen alguna edificación o instalación que imposibilitan su aprovechamiento, como es el caso, señalan, de cementerios o depósitos de agua.

Medio Rural informa que ya se han cedido de forma gratuita a municipios gallegos medio centenar de fincas y que tiene otras 550 solicitudes sobre la mesa. De Pontevedra contabiliza 34 peticiones, mientras que la mayoría las acapara A Coruña -un total de 253-, seguida por Lugo (203) y Ourense (58). Medio Rural confía en mejorar "considerablemente" estas cifras al agilizar los trámites gracias a un nuevo procedimiento en base a la Lei de Mellora da Estrutura Territorial agraria.