La Comisión Europea (CE) concretó ayer el funcionamiento de las ayudas que dará a los ganaderos que decidan reducir su producción láctea desde octubre y por períodos de tres meses con el objetivo de estabilizar los mercados. Estos pagos, a los que podrán acogerse los ganaderos que lo deseen, pretenden ayudar a incrementar el precio de la leche, según explicó ayer el comisario europeo de Agricultura, Phil Hogan, a través de un comunicado.

Los productores que se acojan al plan recibirán 14 céntimos por kilogramo reducido. La Comisión Europea ultimó ayer los detalles del paquete de 500 millones de euros anunciado el pasado 18 de julio para ayudar al sector lácteo, que se suma a otros 500 millones aprobados en el pasado otoño para compensar a los agricultores afectados por la crisis.

La nueva ayuda consta de dos bloques: un mecanismo europeo con 150 millones -destinado a reducir la producción de leche en 1.400 millones de toneladas- y una partida de 350 millones que los Estados miembros gestionarán para promover también la retirada de producción en sectores en dificultades, incluido el lácteo. De esta segunda partida, España recibirá 14,6 millones de euros.

Los ganaderos europeos que decidan acogerse al mecanismo dotado con 150 millones recibirán una ayuda por reducir su producción a partir de octubre y por un período de tres meses hasta diciembre. El esquema se repetirá por períodos sucesivos de tres meses (de noviembre a enero, de diciembre a febrero y de enero a marzo), hasta que se alcance el máximo presupuestario disponible.

Una vez concluido el período en cuestión, los ganaderos dispondrán de 45 días para aportar pruebas de que han reducido la producción, tras lo cual la ayuda podrá ser pagada. Para determinar el pago que corresponda, explica Efe citando a fuentes comunitarias, se tomará como referencia el mismo período del año anterior. Dichas fuentes precisaron que el ganadero podrá pedir como máximo que se le compense por el 50% de lo producido en esos tres meses del año precedente.

En Galicia, incluso sin incentivos, la crisis ha obligado a los ganaderos a reducir la producción en un 3%, como se constata en los datos publicados por el FEGA de junio.

Por otra parte, el sindicato Unións Agrarias anunció que ultima una campaña de boicot a las marcas de leche de Lactalis el próximo mes "por la imposición de los nuevos contratos con cláusulas abusivas e ilegales" a más de 1.200 productores gallegos.