Los diputados de Unidos Podemos y sus socios de las confluencias han vuelto a aprovechar el acatamiento de la Constitución al tomar posesión de sus escaños en el Congreso para lanzar mensajes y, en concreto, los de En Marea han proclamado que "el pueblo es quien manda", a la vez que han reivindicado el gallego, al emplear esta lengua en sus mensajes tanto en la Cámara baja como en la alta.

"El pueblo es quien manda", ha defendido en gallego la portavoz de En Marea, Alexandra Fernández, de Anova. En esa misma línea, su compañero en Anova Miguel Anxo Fernán Vello y Yolanda Díaz, de Esquerda Unida, también introdujeron en su breve alocución la proclama "el pueblo es quien más ordena".

En el caso de Alexandra Fernández también agregó que promete la Carta Magna "sin renunciar a los principios republicanos", mientras que Díaz, también proclamó que seguirá "luchando por lo que resulta moralmente justo y defendiendo a la gente" y Fernán Vello prometió su escaño "como ciudadano gallego, por la defensa de las clases populares".

Por su parte, Antón Gómez-Reino prometió, de Podemos, prometió su escaño "por las instituciones al servicio de la ciudadanía y del pueblo gallego", mientras que su compañera de partido, Ángela Rodríguez, se comprometió a acatar la Constitución "y trabajar para mejorarla", un mensaje similar al lanzado por el líder del partido morado, Pablo Iglesias, puño en alto. "Por un país sin miedo ni violencias machistas", agregó la diputada por Pontevedra.

Finalmente, en el Senado, Vanessa Angustia también empleó el gallego para reivindicar que prometía la Carta Magna "sin renunciar" a sus "principios republicanos". La senadora se comprometió a poner las instituciones al servicio de la clase trabajadora". "No pasarán", concluyó.

Alboroto en la Cámara

Los gestos simbólicos de los diputados de Podemos y sus confluencias volvieron a provocar el alboroto en la Cámara, ya que algunos diputados de otros grupos reaccionaron, al igual que en enero, con murmullos, abucheos o indignación, lo que ha llevado a que apenas se entendieran algunas de las reivindicaciones.

El alboroto ha llevado a la nueva presidenta del Congreso, Ana Pastor, a llamar al orden a los diputados por primera vez, sólo minutos después de haber asumido su cargo. "Guarden silencio", ha reclamado a los parlamentarios Pastor, que se ha visto obligada a intervenir después en otras dos ocasiones para pedir calma.

Uno de los momentos de mayor tensión se ha producido cuando le ha tocado prometer la Constitución a la jefa de gabinete de Iglesias, la dirigente Irene Montero. "Prometo acatar esta Constitución y trabajar para cambiarla. Prometo no olvidar quiénes somos, de qué lado estamos y quiénes han traicionado a nuestro pueblo. Nunca más un país sin sus pueblos y sus gentes", ha asegurado Montero, mientas su compañero de grupo, Manolo Monereo, aún protestaba a gritos por los murmullos de la bancada 'popular'.

Los de Unidos Podemos y las confluencias no han sido los únicos parlamentarios que han querido dejar su sello en este trámite parlamentario. Así, los diputados de ERC y de EH Bildu también han trasladado diferentes mensajes. "Por imperativo legal y por la proclamación de la República Catalana", han defendido cada uno de los republicanos catalanes.