Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Las boticas gallegas se resisten a vender medicamentos y cosmética por internet

Solo 12 farmacias han incorporado la venta online desde que Europa la activó hace un año -La medida de la UE para frenar el tráfico de medicinas en la red no ha tenido éxito

El esquema de atención al cliente de las farmacias gallegas mantiene una estructura de proximidad y cercanía, incluso de distribución de la clientela por zonas, un trato directo que se percibe más, si cabe, en áreas rurales. En julio de 2015 la Comisión Europea puso en marcha la nueva normativa para vender medicamentos y productos de parafarmacia online. Transcurrido el primer ejercicio, con una norma cuyo fin último es evitar falsificaciones y tráfico de medicinas que no cumplan los estándares de calidad necesarios (incluso con riesgo para la salud de los pacientes y clientes), son pocas las farmacias que se han animado a comercializar productos, de manera legal y con todos los requisitos que marca Europa, a través de la red.

En la comunidad gallega son 12 las boticas que, con logotipo de seguridad europeo, venden sus productos a través de su web, con un catálogo propio de las marcas disponibles: cuatro de Vigo, una de Gondomar, una de Nigrán, una de Ourense, dos de Lugo, dos de A Coruña y una de Fene. La comunidad gallega ocupa el décimo puesto en número de boticas con venta online, con solo el 0,8% del total de farmacias que hay en la autonomía y por debajo del 1,3% en el ámbito nacional , con solo 296 farmacias con venta virtual de una red de casi 22.000 establecimientos centrados en medicinas, productos para la salud, dietética o belleza.

En Galicia la cifra es baja pero la medida tampoco ha tenido éxito en otras comunidades: Madrid es la autonomía con más farmacias que venden online (80 en total), seguida de Cataluña, con 75 establecimientos que combinan el despacho tradicional con los pedidos a través de la web; Comunidad Valenciana, con 35 o Andalucía con 25, son de las autonomías con mayor número. La puesta en marcha de este sistema de venta por internet fue una iniciativa de la Comisión Europea, como parte de la directiva antifalsificación 2011/62/UE. De este modo, la ciudadanía puede asegurarse de que los productos que adquiere por internet cumplen los requisitos y están exentos de riesgos. Para ello, las farmacias deben estar en la lista online de Distafarma, creada por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). Además, la web debe llevar un logotipo verde, igual para todos los miembros de la Unión Europea, y que permite al mismo tiempo identificar al Estado miembro.

Sin beneficios

Para el sector, el propio modelo farmacéutico español, con una elevada accesibilidad a las farmacias, a pocos minutos de casa para los ciudadanos, hace que la venta online sea, a priori, un sistema innecesario. También cuenta que las diferencias de precios entre los productos en farmacia y el canal online no son grandes, teniendo en cuenta que las promociones por internet pueden ser una de las salidas para incrementar las ventas por el canal virtual. De momento, para el presidente de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), José Luis Rodríguez Dacal, la venta online no es algo que las farmacias tengan en cuenta. Además, requiere atención y seguimiento virtual: "son medicamentos sin receta y productos de cosmética y belleza; la única ventaja para el cliente es que el pedido le llega a casa, eso sí". Las autoridades sanitarias se aseguran mediante el logotipo en las webs, previo registro y autorización, y el control a través de la AEMPS, de la legalidad y el control de las ventas. No obstante, las farmacias tradicionales se resisten a implantar esta fórmula.

Haz click para ampliar el gráfico

Compartir el artículo

stats