La economía de Galicia creció en el primer trimestre del año un 0,7%. Una décima menos que el avance que experimentó entre octubre y diciembre, por lo que se confirma así la ligera desaceleración que pronosticaban los analistas en las últimas semanas; y una décima por debajo también de la evolución del conjunto del Estado, que fue del 0,8%. En comparación con los últimos doce meses, el Producto Interior Bruto (PIB) regional se elevó un 2,8%, frente al 3,4% del total nacional, según los datos que acaba de publicar el Instituto Galego de Estatística (IGE).

Entre enero y marzo, el gasto en consumo de estancó, sin variación alguno, fruto de la caída un 1,4% del desembolso de las administraciones públicas de la comunidad, mientras que la demanda de las familias aumentó un 0,5%. La inversión de las empresas subió un 1,2%.

Entre los sectores, el mejor comportamiento fue el de la industria, que creció un 3,3%. Los servicios experimentaron un alza del 2,2%, del 2,5% en el caso del comercio, hostelería y transporte. La construcción, la actividad que venía mostrando una importante mejoría tras el pinchazo inmobiliario, cae, en cambio, un 0,7%.