Los gallegos deben trabajar de media 179 días al año, hasta el 28 de junio, solo para cumplir con sus obligaciones con Hacienda, según un estudio elaborado por la Unión de Contribuyentes y la Fundación para el Avance de la Libertad. Esta cifra supone que necesitan dos días menos que la media de España y tres menos que el pasado año. La razón, en el caso de Galicia, es que a la reforma del IRPF estatal se ha sumado también la del tramo autonómico. Con respecto a 2015, la rebaja del IRPF autonómico supone un ahorro de 148 euros para el trabajador medio que, sumado a la estatal (70 euros), se ha traducido en una reducción anual de 218 euros.

En su conjunto, los españoles deben trabajar de media 181 días al año (15.706 euros), de forma que lo que este informe denomina el "día de liberación fiscal" -el momento en que en teoría se saldan las cuentas con Hacienda con los ingresos por el trabajo- se adelanta una jornada al celebrarse el 30 de junio, un día antes que en 2015.

Estos datos se corresponden con un trabajador con un sueldo medio anual de 24.400 euros brutos, casado, con un hijo, un piso y un coche en propiedad, que destina 102 días a pagar cotizaciones a la Seguridad Social, 37 al IRPF, 25 al IVA, 12 a impuestos especiales (gasolina, tabaco, alcohol o impuesto de electricidad) y otros cinco días a otros impuestos. El contribuyente consigue ahorrar al año 1.000 euros, utiliza 150 litros de gasolina al mes, fuma medio paquete de cigarrillos y toma siete cervezas y dos copas a la semana, con unos recibos mensuales de electricidad que ascienden a 50 euros.

La directora general de Unión de Contribuyentes y autora del informe, Cristina Berechet, explicó que en total se destinan 181 días de su trabajo a pagar a la administración, lo que supone 15.706 euros (incluyendo las cotizaciones de la empresa), que hace frente con un sueldo medio de 24.400 euros debido a que el coste laboral del trabajador medio es de 31.696 euros.

"Del 83% de las cotizaciones el trabajador ni tan siquiera sabe que lo está pagando", apuntó Berechet, quien denunció que España es el segundo país europeo con mayor "opacidad fiscal", sólo superado por Estonia. En concreto, el informe muestra que los trabajadores ignoran que la empresa aporta a la Seguridad Social el equivalente a 84 días de trabajo, 7.296 euros por encima del salario bruto.

En cualquier caso, por segundo año consecutivo, el día de la liberación fiscal se adelanta una jornada, al 30 de junio, gracias a la rebaja del IRPF emprendida por el Gobierno y la bajada del tramo autonómico en algunas comunidades.

El esfuerzo fiscal varía de una comunidad autónoma a otra, ya que actualmente existe una horquilla de hasta siete días entre La Rioja (la comunidad con el menor esfuerzo fiscal) y Cataluña (la de mayor presión tributaria). Tras La Rioja, Galicia es la segunda comunidad en la que menos tiempo necesita un trabajador para pagar todos sus impuestos, empatada con Canarias y País Vasco.