El reto de convertirse en una "excepción" en España como el dirigente capaz de revalidar su tercera mayoría absoluta en un período de enorme volatilidad electoral fue señalado ayer como meta del PPdeG por Alberto Núñez Feijóo, aclamado con más del 97% de apoyos como presidente del partido y candidato a la reelección como presidente de la Xunta en el 16º congreso celebrado en Ourense. En su discurso, reivindicó su hoja de servicios y su compromiso con Galicia, garantizando que esta podrá contar con él "hasta el último aliento político" y alertando contra la importación de un reparto de fuerzas que deje en manos del resto de partidos la gobernabilidad de Galicia como ha sucedido en España, forzando, dijo, nuevas generales.

"Ya vimos dónde acabó España dándoles solo unas semanas. No quiero que el futuro de Galicia esté en manos de Mareas-Podemos, PSOE y Ciudadanos", alertó en un cónclave que se cerró con su promesa de renovar la comunidad a través del partido, engrasado para afrontar el sprint de mes y medio antes de las generales y cinco antes de las autonómicas. Feijóo recibió los piropos de la número 2 del PP, María Dolores de Cospedal, por el "sacrificio" de presentarse por tercera vez, así como del presidente de los populares andaluces. "Cuando Alberto habla, el resto escuchamos", reconoció.

De retener el poder, bien a través de mayoría absoluta, bien a través de un pacto con Ciudadanos si este accede a la Cámara gallega, su ascendente crecerá en el partido y las miradas se posarán en él si Mariano Rajoy no alcanza la Presidencia del Gobierno. "Galicia, Galicia, Galicia, no hay otro compromiso", exclamó. "Siempre buscaré que una parte de España mejore, pero no cambio Galicia por nada", añadió.

También celebró de nuevos los logros de su gestión y confió en estar "a las maduras" tras haber pasado las "duras" de los recortes de 2009 y 2012. También agradeció a Ana Pastor, ministra en funciones de Fomento, su compromiso con el AVE.

El propio Rajoy lo felicitó vía redes sociales. "Felicidades a Alberto Núñez Feijóo, el mejor presidente para la mejor Galicia", escribió tras el cierre de un congreso al que no asistió. Su presencia se adelantó al viernes en un acto con Novas Xeracións. El líder del PPdeG también recibió el apoyo de Gerardo Fernández Albor, de 99 años, a través de un vídeo.

Por su parte, Cospedal fue la encargada de lanzar el mensaje en clave nacional y lo hizo rescatando el bipartito siete años después de que este hubiese sido desplazado de San Caetano. "Del gobierno de perdedores entre socialistas y radicales nacionalistas no se recuerda nada bueno", espetó, trazando una comparacióncon el probable pacto PSOE-Podemos tras el 26-J. "Solo buscan repartirse los sillones", añadió, tras asegurar que las comunidades gobernadas por la izquierda dejan facturas sin pagar, a pesar de la situación crítica de las cuentas de la Valencia tras los gobiernos del PP.