Incluir el sobreenvejecimiento y el grado de utilización efectiva de los servicios públicos como criterios en el reparto de fondos en España favorecería a Galicia en un nuevo mapa financiero que las comunidades y el Estado tendrán que definir. El futuro sistema de financiación territorial, del que dependerá la recepción de fondos en Galicia para los próximos años, centró gran parte del debate de la primera jornada del Foro Económico de Galicia, que reúne en A Toxa a empresarios gallegos y a expertos en Economía de las tres universidades de Galicia.

La particular receta de expertos reunidos para pensar propuestas económicas para las negociaciones que se avecinan en el país defiende un modelo de redistribución en el que Galicia no pierda posiciones. Como será necesario determinar las necesidades de gasto el foro aconseja poner por delante dos criterios clave por las características de la comunidad: el envejecimiento de la población, teniendo en cuenta el uso de servicios sociales y la sanidad con un porcentaje de población por encima de los 85 años (y de 65) muy superior a la media, y también el grado de utilización efectiva de los servicios públicos (sanidad, educación y servicios sociales). Ambos reforzarían un modelo equitativo en el reparto.

Los expertos que participan en el encuentro coincidieron en la propuesta presentada por Santiago Lago, profesor de la Universidad de Vigo, del grupo GEN y coordinador del encuentro, si bien también se apuntó a la posibilidad de incluir el nivel de renta. La receta expuesta en el foro incluye la creación de una Agencia autonómica independiente, vinculada al Senado reformado, que imitaría el modelo australiano. Este organismo permitiría, según los asistentes, acercar soluciones técnicas a los políticos, para contribuir a la toma de decisiones.

Los expertos explicaron que la capacidad tributaria es desigual entre regiones en términos per cápita: en Extremadura es de 77 puntos frente a los 136 e Madrid (sobre una media de 100), con más capacidad para financiar los gastos necesarios para atender a sus habitantes. Galicia, con 95, está por debajo de la media. La propuesta del foro también incluye un periodo transitorio de 10 años que evite la caída de la financiación en valores nominales. Esto en referencia al status quo, quizás necesario, según los expertos, con ese periodo de transición de una década.

Los mecanismos de transferencia entre regiones favorecen a Galicia, apuntaron en el encuentro. Sin embargo, serían menos beneficioso la extensión del sistema de concierto a comunidades como Cataluña, conllevando una reducción en los flujos fiscales con una pérdida de entre 570 y 780 millones de euros.

Tampoco sería beneficioso el sistema foral, de manera que la comunidad gallega podría quedar sin un 15% de sus recursos actuales, con una pérdida aproximada de 1.000 millones anuales. Son las estimaciones que realiza en su estudio para el Foro Económico el grupo GEN.

Otra de las claves analizadas en el foro, para que Galicia no pierda terreno en el reparto o salga lo menos perjudicada posible, es la opción de reforzar el Fondo de Compensación Interterritorial, que ha perdido peso. Se trata de un mecanismo importante que Galicia ha de tener en cuenta de cara a la próxima negociación del sistema de financiación. Este modelo que asegura máxima equidad es interesante para muchas comunidades, según el debate en el foro, desde Extremadura hasta Murcia o Comunidad Valenciana.

Por ello el foro apuesta por reforzar esta idea transformando el fondo de compensación en un Fondo Interregional de Desarrollo (FIDE). El diálogo con las comunidades será fundamental, según los expertos, para trabajar en el tema de la "equidad horizontal".

En cuanto a la situación de Galicia en el reparto en los últimos años, los expertos indicaron de un modo dinámico, la comunidad perdió fondos, pero si se realiza una visión estática,en comparación con otras comunidades autónomas, la situación mejora respecto a otras comunidades.