El ministro de Sanidad en funciones, Alfonso Alonso, ha confiado en que se "aclare" lo ocurrido en el Servicio Gallego de Salud, algunos de cuyos cargos están siendo investigados por la Justicia debido al retraso en el tratamiento de la hepatitis C a algunos pacientes que habrían fallecido sin recibirlos, aunque ha asegurado que el plan nacional para combatir esta patología "es un éxito, también en Galicia".

Alonso, que en su condición de presidente del PP vasco se ha reunido este lunes con el lehendakari, Iñigo Urkullu en Vitoria, se ha referido a la investigación abierta por un juzgado de Santiago por el supuesto retraso del Servicio Gallego de Salud en el suministro de fármacos a pacientes afectados de hepatitis C, algunos de los cuales habrían fallecido sin recibirlos.

El Juzgado de Instrucción número 3 de Santiago ha citado a declarar en calidad de investigados a dos altos cargos del Servizo Galego de Saúde (Sergas) por un supuesto delito de prevaricación administrativa.

El juez, por el momento, sólo ha abierto diligencias por un posible delito de prevaricación administrativa, aunque la Fiscalía consideraba que en este caso también podría haberse producido un delito de "homicidio por imprudencia profesional grave", al haberse retrasado la administración de los fármacos "por razones presupuestarias".

El ministro de Sanidad en funciones ha asegurado que el plan nacional de lucha contra la hepatitis C "es un éxito, también en Galicia", por lo que ha confiado en que se "aclaren" los hechos que están siendo investigados.

Dicho plan, según ha explicado, tiene el objetivo de llegar a 52.000 pacientes, 46.000 de los cuales "ya han sido tratados". "El plan es un éxito y está llegando a todos los sitios en todas las partes", ha destacado. Alonso, además, se ha mostrado "muy satisfecho con el comportamiento de las comunidades autónomas" en la aplicación de este plan, y ha rechazado hacer "distinciones" entre ellas.