El transporte de personas y mercancías por carretera empieza a dar síntomas positivos por primera vez desde el inicio de la crisis. Tras una caída constante del número de vehículos en la red viaria autonómica, integrada por más de 5.500 kilómetros, 2015 fue el primer año de recuperación. El tráfico ha vuelto a crecer, poco, pues solo fue un 1%, pero supone un cambio de la tendencia negativa de descenso que mantenía desde 2010. Se ha pasado de una intensidad media de 2.958 vehículos por día en cada carretera a 2.990. No obstante, pese al cambio en la evolución, los registros aún siguen lejos de las cifras de 2006, cuando ese año la media estaba en 3.274 vehículo por día. Por tanto, aún se está un 8,7% por debajo de ese máximo histórico de movilidad por la red autonómica de carreteras.
Tras este giro se encuentra la iniciada recuperación económica y quizás también el paulatino descenso en el precio del combustible, dos factores han animado a la vuelta de camiones y coches a la red viaria. En consonancia con la mayor presencia de vehículos en las carreteras, también ha aumentado el número de kilómetros recorridos al año, que ha pasado de los 5.940 millones de 2014 a los 6.017 del pasado año, según los datos recogidos por la Consellería de Infraestruturas e Vivenda en su red de aforos, pero aún se quedan lejos de los 6.525 millones de kilómetros que realizaron coches y camiones en el año 2010.
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El mayor empuje para impulsar este cambio de tendencia en la movilidad viaria proviene de la provincia de Pontevedra, circunscripción donde el incremento fue el más alto de las cuatro. La subida fue del 2,2%, al pasar de una intensidad media diaria (IMD) de 4.189 vehículos en 2014 a los 4.282 del pasado año. En contraposición, continuó la reducción, eso sí, muy moderada ya, de la presencia de camiones en la red autonómica, que representan el 4,9% de total de vehículos que se mueven por la calle.
La mayor movilidad en Pontevedra se registró en dos vías de alta capacidad, la del Morrazo, por la que circularon cada día de media 12.361 automóviles y camiones, y la autovía de O Salnés, que enlaza Curro con Sanxenxo, con 14.220 vehículos. De hecho, esta vía fue la que más incremento de usuarios registró el pasado año en la provincia de Pontevedra, con una subida del 9,2%, seguida de Lourizán-Ardán (un 5,5% para llegar a 7.303 vehículos) y la vía de O Morrazo (4,7%).
En la provincia de A Coruña el incremento de la movilidad por la red viaria autonómica fue un tercio del registrado en Pontevedra. Los tráficos crecieron apenas un 0,8%, al pasar de la media diaria de usuarios por carretera de 4.188 en 2014 a los 4.225 del pasado ejercicio, prácticamente manteniendo la misma proporción de tráfico pesado.
Las vías más usadas fueron las autovías de Barbanza (12.809 vehículos) y la Santiago-Brión (21.984), aunque la de mayor incremento corresponde la carretera entre O Castelo y el enlace con el acceso a la A-6 en Santa María de Vigo, con el 27%, si bien los tráficos son reducidos, de apenas 4.100 por día.
La menor subida se contabilizó en la provincia de Lugo, con un 0,4%. Se ha pasado de un IMD de 1.430 vehículo a 1.436, prácticamente la misma cifra. La infraestructura viaria más utilizada es la autovía Ferrol-Vilalba, con 6.498 vehículos por día, seguida de la vía de alta capacidad Nadela-Sarria, con 4.332.
Y en Ourense, el tráfico creció un 1,1%, pero las cifras, al igual que en Lugo, también son modestas, pues de media circularon el pasado año por las carreteras 1.541 automóviles y camiones frente a los 1.523 de un año antes. La mayor intensidad corresponde a la autovía Santiago-Ourense, con 8.568 vehículos, seguida de la Ourense-Celanova, con 4.239.
Estos datos ponen fin a una racha negativa que se inició en el año 2010 con la recesión. Y a pesar del cambio de tendencia, las diferencias sieguen siendo sustanciales, pues el número medio de usuario ha bajado desde entonces un 9,3%, a pasar de los 3.293 a los 2.990 actuales.
Autovía de O Salnés: máximo número de usuarios de toda la red autonómica un domingo de agosto
- El récord de usuarios en un día de la toda red autonómica de carretera corresponde la autovía de O Salnés. Fue el domingo día 9 de agosto del pasado año, cuando la vía de altas prestaciones que une Curro -cerca de Pontevedra-con Sanxenxo fue utilizada en una sola jornada por 37.431 vehículos. Se trata de una carretera que comunica el interior de la provincia con la playa, de ahí que en verano esté muy concurrida.A muy poca distancia se sitúa la autovía Santiago-Brión, por la que el viernes 19 de junio circularon 36.603 coches y camiones. Y la tercera con el mayor pico de tráfico fue la autovía de Barbanza, por la que circularon 26.947 vehículos también el 9 de agosto.Se da la circunstancia de que estas tres vías son explotaciones por concesiones privadas, junto con la Ourense-Celanova y que salvo la Santiago-Brión, las otras tres pasaron por problemas económicos derivados de la bajada de los tráficos que obligaron a la Xunta desde el año 2014 a aportar una inyección extra de fondos para garantizar el equilibrio de las empresas concesionarias.Todas ellas funcionan con el llamado peaje a la sombra, de forma que la Administración paga un canon anual en función del número de usuarios. Pero la evolución del tráfico fue inferior a las previsiones, un 40%, por lo que la Xunta acordó en 2014 aportar siete millones de euros adicionales.Ahora resulta que en 2015 las tres autovías con problemas vieron como aumentaba el número de usuarios, por lo que se tendrá que ajustar de nuevo el canon, pero apenas será testimonial. La de Barbanza ganó 600 vehículos más con respecto a 2014 para llegar a los 12.809, mientras que la de O Salnés subió un 9,2% (14.220) y de la Celanova, un 6,1% (4.239).
