PP y PSdeG han rechazado arriar la bandera de la Unión Europea en el Pazo do Hórreo, sede del Parlamento de Galicia, una postura que han transmitido en la reunión de la junta de portavoces a raíz de la propuesta del BNG para llevar a cabo esta medida simbólica por la respuesta de los socios europeos a la crisis de los refugiados. La propuesta la hizo el BNG y a ella se sumaron el Grupo de AGE y el Mixto, mientras que los otros dos se posicionaron en contra.

Populares y socialistas han defendido su postura pese a que en el pleno del Ayuntamiento de Santiago el pasado jueves estas dos formaciones políticas votasen a favor de situar a media asta el paño europeo, al respecto de lo que las representantes de ambos grupos se han limitado a "respetar" las decisiones en otras instituciones.

Así, para la viceportavoz del Grupo del PSdeG, Carmen Gallego, lo "prioritario" en la Cámara autonómica es, a su juicio, lograr una declaración institucional. Aunque no ve incompatible acordar un texto y arriar la bandera, ha insistido, en respuesta a varias preguntas, en que es "más importante" la otra actuación.

Por su parte, su homóloga del Grupo Popular, Cristina Romero, ha dicho que el PP "está en contra de arriar la bandera" y ha defendido el "acuerdo sensato y razonable" al que se llegó el pasado viernes, a su juicio, entre la Unión Europea y Turquía.

Declaración institucional

Así las cosas, la diputada socialista ha defendido que se consensúe una declaración institucional contra una decisión política que "va en contra de los derechos fundamentales y en contra de los derechos humanos, impidiendo el asilo a miles de refugiados que están huyendo de una guerra".

Gallego ha apoyado su postura sobre la base de "no confundir las instituciones con lo que son sus gobiernos", en referencia a que la decisión de la UE la atribuye a una decisión política con la que, ha insistido, no están de acuerdo. Lo cual, ha puntualizado, "no quiere decir que estemos en contra de una Unión Europea como espacio de paz y libertad".

"Nos parece mucho más importante, y con más fuerza vinculante", ha insistido la viceportavoz socialista al respecto de la declaración institucional frente a arriar la bandera, aunque ha reconocido que una cuestión no invalidaba la otra.

Cristina Romero ha manifestado que el PP "está en contra" de la decisión de arriar la bandera, pese a que su partido sí apoyó la moción de Compostela Aberta --aprobada por unanimidad-- en el pleno del Ayuntamiento de Santiago para situarla a media asta; y ha acusado a "determinados grupos nacionalistas" de hacer "demagogia", porque por un lado "están arriando la bandera y, por otra, ponen sus dos manos para recibir inversiones de Europa para las ciudades donde gobiernan".

Además, la diputada popular ha señalado que su grupo "considera que una bandera significa muchísimo más que una decisión determinada", y ha insistido en que el pasado viernes se llegó a un "acuerdo sensato y razonable" que "respeta" de forma "rigurosa" la legalidad europea e internacional y que recoge "la exclusión de forma expresa de cualquier tipo de expulsión colectiva".

Propuesta simbólica

"Era un gesto simbólico" frente a esas "decisiones" de la Unión Europea que "no nos representa", ha manifestado el viceportavoz de AGE, Antón Sánchez, quien ha lamentado las "decisiones criminales que todos los días provocan la muerte de niños y niñas que no tienen la culpa de nada".

Por su parte, el portavoz parlamentario del BNG, Francisco Jorquera, ha indicado que se propuso como "un gesto simbólico" frente "a un acuerdo que atenta contra los derechos humanos" y ante el que el Parlamento "no puede ser indiferente".

Sobre la propuesta de declaración institucional se ha mostrado "escéptico", porque, ha censurado, "es el Gobierno español el que atenta el propio mandato que le dio el Congreso de los Diputados por una profesión de fe europeísta.