Son cada vez menos las administraciones que pagan a sus proveedores por encima de los 30 días de plazo legal. Pero las que incumplen la Ley de Morosidad lo hacen de manera reiterada, en especial los ayuntamientos, y con tanto retraso que hunden cada mes más las apretadas cuentas de autónomos y pequeñas empresas. Según los datos de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) presentados ayer en A Coruña, la Xunta, las diputaciones y las ciudades gallegas -sin contar Ferrol- acumulaban en noviembre del año pasado facturas impagadas por un importe de más de 675 millones: 600 millones en recibos del Ejecutivo autonómico, más de 63 millones de las urbes y los 12 restantes de las corporaciones provinciales. De las ciudades, Vigo es la que arrastra menos deuda (2,6 millones) frente a A Coruña, que en noviembre debía a sus proveedores más de 27,4 millones.

En el segundo puesto del ranking de urbes gallegas con más recibos acumulados en los cajones municipales está Lugo (12,1 millones). Le siguen Santiago (10,4 millones), Ourense (7,3 millones) y Pontevedra (3,2 millones). En relación al mes de mayo, periodo que analizan los autónomos gallegos, los pagos pendientes a los proveedores disminuyeron en Vigo (-70%), Ourense (-28,7%), Pontevedra (-28,1%) y A Coruña (-8,6%). Sin embargo, las facturas sin poner al día aumentaron en Santiago (48,1%) y en Lugo (13,4%).

En el caso de la Xunta, los autónomos advierten de un incremento de más del 64% del volumen de facturas impagadas entre mayo y noviembre, al pasar de los apenas 363 millones que debía en primavera a los más de 600 millones de finales del año pasado. Y el tiempo de espera para cobrar también fue a más; una media de 60 días -13 más que en mayo, lo que supone un incremento de casi el 30%-.

En comparación con otras comunidades, sin embargo, los proveedores y pequeñas empresas gallegas logran cobrar de las administraciones antes. En Galicia, el tiempo medio para que el sector público ponga sus facturas al día es de 64 días, un total de 22 días menos que la media nacional.

Las diputaciones de A Coruña y Pontevedra sí cumplen la Ley de Morosidad, al pagar en 23 y 25 días, respectivamente.

En la presentación del balance del pago a proveedores del pasado mes de noviembre, Álvaro Viqueira, coordinador de Proyectos de ATA Galicia, reclamó "tolerancia cero" con la morosidad y advirtió de que mientras la falta de pago de un recibo por un autónomo supone un recargo del 20%, cuando la administración pública incumple no asume esta carga, según informa Efe. "Proponemos que haya inspectores que controlen esa morosidad", reclamó Viqueira.

El presidente de ATA Galicia, Rafael Granados, alertó de que la morosidad "es uno de los problemas que acarrea la pérdida de empleo" pese a que "pocas comunidades cumplen la ley".