Un viaje a Baleares con las selecciones de fútbol base gallegas evitó ayer que Rafael Louzán, expresidente de la Diputación de Pontevedra, declarase en Cambados en el caso del alquiler de varios bajos comerciales en Vigo. Louzán estaba citado a declarar por el juez del número 2 de Cambados a las 16,00 horas, pero un par de horas antes su procuradora pidió la suspensión de su comparecencia por un viaje y se aceptó. Ahora el juez deberá señalar una nueva fecha y todo apunta a marzo.

La causa que se instruye en el juzgado número 2 de Cambados se refiere al alquiler de una serie de bajos comerciales en el barrio de Navia, en Vigo, una actividad en la que se considera que pudo haber un presunto delito de cohecho continuado. Esta causa se inició a fines de 2013, a raíz de la llegada a la Fiscalía de una denuncia anónima según la cual el expresidente de la Diputación y su mujer estarían cometiendo un supuesto cohecho. En la misma causa también se encuentra Severino Reguera, exdiputado provincial del PP, edil en Pazos de Borbén y uno de los socios de la panadería que tiene arrendados los bajos. Según la denuncia, Louzán y su esposa estarían cobrando a Reguera más dinero del que costaría el alquiler y este aceptaría el sobrecoste a cambio de recibir favores políticos.

Louzán fue citado a comparecer hace casi un año, pero se acogió a su derecho a no declarar hasta que se examinase con detalle la documentación. Luego pidió él la comparecencia y fue citado ayer. Reguera ya pasó por los juzgados y aseguró que no había recibido ningún favor político de Louzán.