Tras admitir la "falta de agilidad" de la coalición gallega por la ausencia de Galicia en la negociación que el grupo confederal de Podemos mantiene con Pedro Sánchez para la investidura, En Marea ha decidido tomar la iniciativa y negociar por su cuenta con el PSOE las condiciones de la comunidad gallega para apoyarlo. Así, lo adelantó ayer la portavoz en el Congreso, Alexandra Fernández, que advirtió que no puede existir un gobierno de cambio si no se atienden las demandas de Galicia como un reparto justo de las cuotas del cerco, un aumento de precios para el lácteo o la derogación de la prórroga de Ence en la ría de Pontevedra. Y advirtió que tienen "autonomía" y, por lo tanto, podrán votar de forma diferente a Podemos en caso de no estar de acuerdo con alguna cuestión.
En el documento que Podemos puso sobre la mesa para negociar con Pedro Sánchez aparecen alusiones al referéndum en Cataluña, extensible a "las naciones que lo planteen con especial intensidad" o a la perviencia de las diputaciones vascas. Pero no se menciona a Galicia, lo que fue duramente criticado por PP, PSOE y BNG.
En Marea ha decidido ahora abrir un cauce de diálogo directo con los socialistas sobre las demandas de la comunidad autónoma y justifica que si no se hizo antes fue porque estaban esperando "a que se abriese el momento de las negociaciones". "Estábamos en una especie de show. Parecía que Sánchez se estaba dando tiempo a sí mismo para acabar de decidirse", argumentó Alexandra Fernández, que intervino ayer como moderadora en una conferencia en Santiago en la que participaron el portavoz de Anova, Xosé Manuel Beiras, el diputado de AGE, Antón Sánchez, el sociólogo portugués Boaventura de Sousa y la diputada y el exdiputado de la CUP, Anna Gabriel y Quim Arrufat.
La portavoz de En Marea en el Congreso precisó, en todo caso, que la formación integrada por Anova, Esquerda Unida y Podemos Galicia trabaja en dos escalas: por un lado, dentro del grupo confederal, en el que tienen unas "líneas básicas" a nivel de Estado y, por otro, dentro de la propia formación de En Marea, que negociará con el PSOE con un "documento propio". "Tenemos que abrir diálogo desde En Marea con el PSOE, a mayores de las negociaciones que se puedan dar dentro del marco del grupo confederal", aclaró.
Entiende también Alexandra Fernández que es el momento de "abrir un proceso constituyente" en donde "se abra el debate sobre "la cuestión territorial", que opina que "solo se puede solucionar a partir del derecho a decidir de los pueblos".
Cuestionada por el acercamiento de posturas entre PSOE y Ciudadanos, la portavoz de En Marea recalcó que "cualquier gobierno (con este partido) va a ser un gobierno de recambio". "Vemos incompatible cualquier tipo de gobierno que sea con el PP 3.0", zanjó.
Preguntada entonces por si En Marea tendría una disciplina de voto diferente a la de Podemos en caso de no estar de acuerdo con alguna cuestión, Alexandra Fernández subrayó que sí: "Claro que tiene autonomía política para decidir cuál va a ser su posición".
