El subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra realizó durante el pasado año un total de 3.658 pruebas de drogas a conductores, de los que dieron positivo 1.397, la mayoría de ellos por consumo de cannabis.

Tal y como ha informado el Instituto Armado, en 2015 se realizaron 302 pruebas por accidentes de tráfico, siendo positivas 34; 113 por infracciones, con 70 positivas; y 3.243 en controles preventivos, con 1.397 positivas.

En lo relativo a las sustancias detectadas, algunos de los conductores dieron positivo en varias de ellas, siendo la más habitual el cannabis-THC, con 985 positivos detectados. Le siguen la cocaína (561 positivos), opioides (160), anfetamina (46) y metanfetamina (26).

La Guardia Civil ha indicado que el número de pruebas realizadas en 2015 se incrementó "notoriamente" respecto al año anterior, ya que en 2014 se efectuaron 978 test, de los que 485 conductores resultaron positivos.

Según ha recordado, las drogas "constituyen un factor de riesgo de extraordinaria importancia en la conducción" y conducir bajo sus efectos "no solo deteriora la capacidad para conducir con seguridad, sino que además está asociado a un mayor riesgo de implicación en accidentes de tráfico con resultado de heridos graves y fallecidos".