Militante de Anova, la viguesa Alexandra Fernández ejerce de primera portavoz de En Marea en el Congreso. Considera que el veto socialista a su grupo parlamentario constituye la prueba de que solo las candidaturas afines a Podemos representan el cambio frente a las "élites", que identifica con PP, PSOE y Ciudadanos.
-Continuamos viendo posibilidades con la Mesa para llegar a un acuerdo. Legalmente cumplimos los requisitos. Es una cuestión de voluntad política y de que la Mesa no haga una interpretación de parte de la ley para dejar a En Marea sin grupo, y más cuando representa a más del 25% de gallegos. Pero cualquier decisión que tomemos lo haremos colectivamente.
-Los otros partidos se niegan...
-Es un fraude democrático por parte de los tres partidos que se han aliado y replegado en ese búnker para que nada se mueva. Hoy (por ayer) se visibilizó por qué somos las candidaturas de la transformación, que queremos acabar con el gobierno de los partidos del régimen y la corrupción, y renovar las instituciones. Quedó clara esa polarización entre las élites que se repliegan y la gente de lo común que quiere llegar a las instituciones para actuar de otra forma. Esos partidos del régimen se alinean para no permitir que la pluralidad que salió de las urnas esté representada en el Congreso. Hay una falta de respeto a la democracia porque miles de gallegos votaron a En Marea para que tuviese grupo propio. También tendremos que pedir explicaciones al PSdeG, que quedó por detrás de En Marea, sobre por qué les impide a los gallegos tener voz.
-¿Dificultará este escenario una alianza con el PSdeG tras las autonómicas?
-Lo que queda claro es que En Marea es la alternativa real al PP.
-¿El bloqueo a su grupo imposibilita un acuerdo para la investidura de Pedro Sánchez?
-Existen dos almas en el PSOE, una que quiere continuar con las políticas del PP y otra a favor de un gobierno progresista. Por lo de pronto, todo indica que quieren seguir caminando hacia el momento en que el PSOE pactó con el Partido Popular la reforma de la Constitución. No le vemos ningún gesto de voluntad de llegar a un acuerdo, así que es complicado pensar en esa hipótesis. Pero les corresponde a ellos dar el paso.
-¿Sacrificarían un pacto de gobierno por no tener grupo?
-Al PSOE le dijimos que estamos dispuestos a negociar tiempos y recursos. Nosotros no ponemos ninguna línea roja. Estamos diciendo que lo que se votó tiene que estar representado y no estamos dispuestos a ser cómplices de ese fraude. El PSOE no puede usar la conformación de estos grupos como excusa para pactar con C's la Mesa del Congreso, apoyados en el PP.
-Pablo Iglesias no quiso decir cuántos diputados tenía Podemos. ¿Cuántos tiene?
-Lo que tengo claro es que En Marea tiene seis.
-¿Y Podemos tiene 42 o 69?
-En Marea tiene seis.
-El secretario xeral de Podemos en Galicia abrió la posibilidad de que este partido se presentase en solitario a las autonómicas y criticó la campaña por recurrir a la "vieja política". ¿Qué opina?
-Debemos seguir caminando en la línea de En Marea, no porque piense que es más nacionalista o menos. Si las herramientas funcionan, las seguiremos usando. Estamos en disposición de disputarle la Xunta al PP. Hicimos una buena campaña. En mes y medio nos convertimos en segunda fuerza y quiero agradecérselo a toda la gente que participó en ella.
-AGE fue su precedente. ¿Se repetirán sus escisiones en el Hórreo en las filas de En Marea?
-Las fórmulas que usamos están siendo innovadoras y no podemos pensar que son perfectas. Las vamos mejorando. Aprendimos mucho con AGE. Creamos las mareas y En Marea desborda a estas. Animo a seguir trabajando para mejorar.
