La plataforma Queremos Galego ha recurrido en los juzgados la multa interpuesta a la organización por la manifestación en defensa del gallego del 17 de mayo de 2013. Al respecto, el presidente de A Mesa pola Normalización Lingüística, Marcos Maceira, defiende que "no hubo incidentes" en una protesta que fue "un éxito" y transcurrió "con normalidad".

Al tiempo, pide al PP que deje de "molestar" a los colectivos que quieren ejercer la libertad de expresión y defender el gallego, y también que no "use" para fines políticos las instituciones públicas y, en concreto, la Policía y el Ministerio de Interior. En declaraciones a los medios antes de la vista, Maceira relató que los hechos se remontan al 17 de mayo de 2013, en relación a la manifestación en defensa del gallego que recorrió las calles de Santiago en esa jornada y que, advirtió, "ya intentó impedir" el entonces gobierno local del PP "denegando el palco y el permiso para tener una manifestación en condiciones" a la organización.

"No contento el PP con esto porque ganamos en el juzgado la posibilidad, como mínimo, de tener una megafonía, tres meses después de la manifestación, que fue un éxito, llegó a Queremos Galego la notificación de una multa que podía estar entre 200 y 6.000 euros", señaló, antes de concretar que el Gobierno cuestiona que la manifestación estuviese dotada con el adecuado servicio de orden. Tras recibir esta notificación, A Mesa recurrió a la Delegación del Gobierno, "el organismo" que, según sus palabras, "utilizó el PP", así como "a la Policía". Y es que, A Mesa defiende que la protesta, que se celebra todos los años el Día das Letras Galegas, "transcurrió con normalidad".