El ex alcalde de Ponteareas, Salvador González Solla, negó ayer en su comparecencia en el Juzgado de Ponteareas cualquier trato de favor en la concesión del contrato de la planta potabilizadora de agua de Ponteareas a Aquagest en el año 2013.

El anterior regidor respondió a todas las preguntas, incluso del abogado del Ayuntamiento, que se ha personado en la causa, pero solo se abordó el contrato de la planta potabilizadora.

Aquí, el regidor explicó que lo que se hizo por parte del Concello fue una ampliación del contrato e indicó que Aquagest ya gestionaba la anterior planta de cloración de agua que fue sustituida por la nueva potabilizadora.

Además, Solla negó rotundamente que hubiese recibido regalo alguno por esta ampliación "ni por ningún contrato". Aseguró que el contrato realizado era anterior a su llegada a la alcaldía y "cuando tuvimos que hacer la ampliación, lo hicimos con todos los informes favorables... Yo no tenía problema alguno en hacer un concurso o no, pero todos los informes fueron favorables a la ampliación que aprobó el pleno".

El ex alcalde recordó que el contrato es de 1989 y modificado en 1998. y dijo que durante su etapa de alcalde no firmó "ningún contrato con Aquagest y en esta ampliación de servicio se contó con todos los informes".

Solla debe responder por la adjudicación de la Planta potabilizadora después de que la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional en su atestado de la Operación Patos, indicase que la estación de tratamiento de agua potable E.T.A.P. de Ponteareas, fue adjudicada sin licitación, ni procedimiento administrativo legal alguno, por la vía de hecho a la empresa Aquagest, con tan sólo una providencia municipal. Según la Policía este modo de proceder podría ser constitutivo de delito de prevaricación.

Solla señaló en el Juzgado que la providencia que cita la Policía sirvió para iniciar en el expediente "en que el aparecen informes diversos... Todos los expedientes se inician con una providencia.

El ex alcalde del PP en Ponteareas tenía que responder sobre otros asuntos por lo que también está imputado, pero la falta de tiempo impidió su declaración. La ex teniente de alcalde, Belén Villar, que inicialmente había sido citada para el lunes, así como la secretaria e interventores de aquel momento, que también están imputadas, serán llamadas a declarar próximamente.

Ayer, en el interrogatorio al ex alcalde, solo hubo tiempo a abordar la problemática de la planta potabilizadora y quedarán para un nuevo emplazamiento la justificación de una subvención de Agader para la realización de obras en una sendero del río Tea y la contratación de una orientadora laboral así con la justificación de gastos en el Centro de Día.

El ex alcalde acudió al Juzgado con su abogado, Norberto Uzal, ex director xeral de Administraciones Públicas y que afirmó que detrás del caso existe mucha confusión. "Viene de conversaciones que se le toman a Belén Villar". "En ese marco hay una serie de conversaciones, y como detectan que hay algunas conversaciones que afectan a expedientes municipales, la UDEF entiende que hay una serie de irregularidades en esos expedientes". De esta forma, ha dicho que la implicación de González Solla responde a "una mala interpretación" y ha incidido en que, "con las explicaciones que se van a dar, va a quedar claro que no es que no exista ningún delito, es que ni siquiera existen irregularidades administrativas".