La reducción del viaje en tren de Galicia a Madrid a cinco horas y media está muy próxima. El Ministerio de Fomento anunció para finales de año la apertura de los 99 kilómetros entre Olmedo y Zamora, pero por el momento todavía no se ha fijado la fecha de su entrada en funcionamiento y Renfe aún sigue vendiendo billetes, por lo menos hasta el 10 de enero, por la vía actual.

No obstante, las pruebas en la nueva línea avanzan. La última, este fin de semana en el cambiador de ancho de vía instalado en la estación de Zamora, un dispositivo necesario para que los Alvia que conectan Galicia y la capital puedan utilizar los dos tipos de vía -ancho internacional e ibérica-, elemento clave para que reduzcan el tiempo de viaje en media hora.

En las próximas semanas, Adif continuará con las pruebas hasta que los técnicos den el visto bueno definitivo a la infraestructura y, en consecuencia, Fomento decida la puesta en servicio del nuevo tramo de acceso ferroviario a Galicia.

De abrirse esta línea antes de que finalice el año, son dos las opciones que se sopesan ante los miles de billetes ya vendidos hasta el 10 de enero, último día disponible para la compra en la página web de Renfe. Por un lado, Fomento puede fijar otros horarios para los trenes que circulen por el nuevo tramo o bien facilitar el cambio de billete a los usuarios que ya lo adquirieron. Pero a día de hoy no se descarta la posibilidad de que en lugar de abrirse la línea este año como estaba previsto se haga a principios del próximo.

En cuanto a la reducción en el tiempo de viaje, el trayecto con la apertura de la nueva línea a Zamora se reducirá a cinco horas y media. En la actualidad, la mayoría de los viajes son de seis horas y veinte minutos, frente a las seis horas que deberían durar ya que en el último año tuvo que incrementar el tiempo de viaje debido a las "limitaciones de velocidad temporal" por los trabajos próximos a la línea, según apuntan desde Adif.

Las pruebas en el cambiador de vía de Zamora, que permitirán cambiar de manera automática y rápida el ancho del tren de rodaje, se llevaron a cabo el domingo por la mañana. Los trenes circularán desde Madrid hasta Zamora en modo eléctrico y en vía de ancho internacional, para al llegar a este punto, cambiar al ancho ibérico y a tracción diésel de forma casi automática, dado que la línea gallega está sin electrificar y así seguirá hasta el año 2018, cuando está previsto que entre en servicio la nueva línea del AVE.