Aunque todavía no han avanzado cuándo retomarán las protestas para denunciar los bajos precios de la leche, los ganaderos gallegos contarán con un balón de oxígeno desde el próximo viernes, cuando se comenzarán a abonar los 65,3 millones de la Política Agraria Común (PAC). En esta partida se incluye además los 18,2 millones de ayuda acoplada al sector lácteo.

La nueva directora xeral de Gandaría, Belén do Campo, destacó ayer en la comisión de Agricultura del Parlamento gallego que estos 65,3 millones son "el mayor anticipo de la PAC pagado nunca en Galicia". La ayuda acoplada de la PAC al sector lácteo de 18,2 millones se repartirá entre 7.151 beneficiarios en Galicia que han sufrido meses de pérdidas desde la primavera. Lugo y A Coruña copan la mayor parte del reparto con 8,1 y 7,8 millones respectivamente, mientras que a los ganaderos de la Pontevedra les corresponden 2,2 millones de euros y a los de Ourense 100.000 euros.

Do Campo, en su primera comparecencia en comisión como directora xeral de Gandaría, destacó que el acuerdo lácteo va a "incidir de forma positiva" en los precios de "próximos meses" pero pidió tiempo para que tenga efecto. Para la diputada del BNG Tereixa Paz el acuerdo lácteo, por el contrario, es un "fiasco" como lo "evidencia" la protesta del jueves en Santiago de entrega de leche gratuita a los ciudadanos. Paz lamentó que Belén do Campo tenga "pocos cambios en la línea argumental" de su predecesora en el campo, mientras hay se cierran "un millar de explotaciones" al año.