La vivienda usada conquista a los compradores en Galicia. Su precio más bajo que el de los pisos a estrenar, su menor gravación fiscal y una mayor facilidad de financiación han convertido este año la segunda mano en protagonista de las transacciones. En este mercado, Galicia está entre las comunidades con el precio más alto por metro cuadrado y se convierte en la segunda autonomía, por detrás de Castilla y León, que menos sufrió el embate de la crisis durante el último lustro. Mientras en el conjunto del Estado, el precio medio de la vivienda de segunda mano cayó en los últimos cinco años más de un 27% -pasó de los 2.262 euros por metro cuadrado que costaba en 2010 a los 1.646 del pasado mes de septiembre-, en la comunidad gallega el descenso fue del 19,7%: en la actualidad el coste de los pisos de segunda mano en Galicia es de 1.634 euros el metro cuadrado frente a los 2.034 de hace cinco años.
Este dato coloca a Galicia como la séptima comunidad con el precio de los inmuebles de segunda mano más alto de España y como la tercera con la tasación más elevada de las autonomías del norte, por detrás de País Vasco (2.818 euros) y Cantabria (1.762 euros). En el balance del pasado mes de septiembre del Índice inmobiliario fotocasa destaca Galicia como la comunidad que mejor variación mensual registró, con un incremento en el precio del 0,6% respecto a agosto frente a siete comunidades que soportaron un descenso en su mercado inmobiliario -Navarra, Aragón, Castilla y León, La Rioja, Comunidad Valenciana, Murcia y Castilla-La Mancha-.
En la variación trimestral, Galicia también está en la lista de comunidades que pusieron a la venta vivienda de segunda mano con precios al alza. Mientras el incremento en el conjunto del país fue del 0,7%, en la comunidad gallega el aumento fue superior (1%), solo por detrás de Canarias (3,4%), Cantabria (1,4%) y Murcia (1,3%).
Solo el año pasado se vendieron en Galicia casi el triple de viviendas usadas (casi 10.400) que de nueva construcción (casi 3.700). Un escenario que nada tiene que ver con el comportamiento de la demanda antes del pinchazo de la burbuja inmobiliaria. En 2007, el 60% de las operaciones de compraventa realizadas en Galicia fueron de pisos a estrenar. Ya a partir de 2009, las diferencias entre vivienda nueva y de segunda mano comenzaron a acortase, cayendo las ventas en ambas modalidades aunque en el caso de los pisos usados a una velocidad menor que los de nueva construcción. Y desde el año 2011, la compra de viviendas usadas empezó a superior a los pisos de reciente edificación.
El principal motivo que en los últimos años ha inclinado la balanza a favor de los pisos de segunda mano, en España en general y en Galicia en particular, es su precio, más asequible para el comprador: entre un 5 y un 15% más barato que las vivienda a estrenar. Su bajo precio además ofrece un mayor margen de negociación cuando está en manos de particulares, sobre todo en inmuebles comprados en época de bonanza.
Otro factor que ha favorecido la venta de vivienda de segunda mano es que está gravada con menos impuestos así como la mayor financiación que ofrecen las promotoras y los bancos dueños de viviendas.
Los inmuebles usados cotizaban en Galicia hace cinco años a 2.034 euros el metro cuadrado, frente a los 2.262 de media nacional. En la actualidad, el precio en la comunidad gallega supera los 1.600 euros, un 19,6% menos que hace cinco años, frente a la caída del 27,2% en el conjunto del país (1.646 euros por metro cuadrado). Junto con Castilla y León, Galicia fue la comunidad que mejor sobrellevó la crisis de precios en las ventas de viviendas de segunda mano. En el caso de Castilla y León, su importe en los últimos cinco años cayó un 11,2% -en 2010 el metro cuadrado ascendía a 1.651 euros y en la actualidad cuesta 1.465 euros-. Estos datos convierten a Galicia y Castilla y León en las únicas comunidades que sufrieron un descenso desde 2010 por debajo del 20%.
El mayor desplome en el mercado de segunda mano en el último lustro se produjo en Castilla-La Mancha (-44%), seguida de Aragón (-34,7%), La Rioja (-34,5%), Navarra (-33%) y Cataluña (-30,3%).
En términos de precio medio, País Vasco (2.818 euros metros cuadrado), Madrid (2.235) y Cataluña (2.087) ocupan los primeros puestos de la clasificación.
