Casi la mitad de la población gallega no realiza ningún tipo de actividad física en su día a día. No se trata solo de un mal hábito, se ha convertido ya en uno de los principales problemas de salud pública. Según la Xunta, el sedentarismo es ya el tercer factor de riesgo que más incide en la mortalidad. No solo perjudica al bienestar de quien lleva ese estilo de vida sedentario sino que además tiene un coste social y económico que en Galicia podría rondar los 235 millones de euros anuales, según los cálculos de la OMS. El Sergas es consciente de que tiene que minorar su impacto y somete ya a control a casi 132.000 gallegos en los que ha detectado un alto grado de sedentarismo. Más de 200 facultativos han asistido a cursos de formación específico para tratar a estos pacientos y, a través de las consultas en los centros de salud, guiarlos para que hagan al menos 30 minutos diarios de actividad física.
El programa empezó en 2012 con solo 19.173 gallegos y ahora ya alcanza los 131.830 inscritos en el registro de actividad física. Estos controles se realizan ya en 429 ambulatorios de la comunidad autónoma. Su implantación fue posible con la puesta en marcha del sistema Ianus, que extendió la historia clínica y la receta electrónica. En los centros de salud los pacientes son sometidos a un cuestionario, validado a nivel internacional, que permite evaluar en cinco minutos su grado de sedentarismo -bajo, moderado o alto-, de manera que queda registrado en su historial. Si es elevado, a partir de ese momento el facultativo tendrá en cuenta este factor a la hora de tomar cualquier decisión médica y tratará de orientar al paciente para que cambie su estilo de vida y empiece a hacer algún tipo de actividad física. El objetivo es combatir enfermedades vinculadas a los hábitos sedentarios como la obesidad, la hipertensión arterial, las dolencias coronarias, el ictus cerebral, la diabetis tipo 2 y algunos tipos de cáncer.
Para ello previamente el Sergas ha formado a los médicos para que actúen ante este problema de salud. Desde 2012 un total de 210 médicos de atención primaria han asistido a los cursos específicos para fomentar un estivo de vida activo.
Según la última Encuesta Europea de Salud en España 2014, Galicia es la quinta comunidad autónoma con más sedentarismo. El 40 por ciento de los encuestados reconocen que no realizan ninguna actividad física a lo largo del día, un porcentaje que solo superan Castilla La Mancha (45 por ciento), Murcia (44,4 por ciento), Aragón (41,6 por ciento) y Cantabria (41,4 por ciento).
Son notables además las diferencias entre sexos. Las mujeres son más sedentarias que los hombres (un 45,8 por ciento declaran no hacer ningún tipo de ejercicio físico frente al 34,3 por ciento de los hombres).
Los cambios en los hábitos de vida de la población han derivado en los últimos años en un descenso de la actividad física. De hecho, según advierten los estudios epidemiológicos recogidos por la Xunta, el sedentarismo es más alto en los países de ingresos altos y medios.
"El movimiento corporal fue durante años la principal herramienta que permitió a nuestros antepadados buscar alimento, defenderse de los depredadores, desplazarse por los territorios. En la actualidad, nuestra confortable forma de vida ya no es coherente con el diseño corporal", explica la Consellería de Sanidade.
Existen ya incluso estudios que advierten que el 6 por ciento de las muertes estaría asociado a un problema vinculado a la falta de actividad física. En cifras económicas, la OMS calcula que esto absorbería el 7 por ciento del presupuesto de sanidad, lo que en Galicia rondaría los 235 millones de euros.
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El mejor fármaco contra el cáncer o la depresión
- Nadie duda de que el ejercicio físico es saludable. Pero no se trata solo de una cuestión estética o de estar en forma para correr un maratón. Los beneficios van desde la prevención de enfermedades como el cáncer de mama o de colon, evitar la ansiedad o la depresión o mejorar la calidad del sueño. En la web Xente con Vida, la Consellería de Sanidade desgrana las ventajas de la actividad física y deja claro que, en algunos casos, "tiene mejores resultados que los medicamentos" y además no tiene efectos secundarios:| Protege contra enfermedades. La falta de actividad física es la causa principal de cerca del 25 por ciento de los casos de cáncer de mama y colon y del 27 por ciento de los casos de diabetes y alrededor del 30 por ciento de las cardiopatías isquémicas. Hacer ejercicio reduce los riesgos de hipertensión arterial, enfermedad coronaria o ictus cerebral. Además rebaja el colesterol.| Menos fatiga. La actividad física mejora y mantiene la condición física caridorrespiratoria, de manera que quienes la practiquen tendrán menos fatiga y se recuperarán antes tras un esfuerzo. Además, facilita la ejecución de tareas cotidianas.| Por estética. Reduce la grasa corporal, lo cual favorece una buena estética, con una postura erguida y menos obesidad abdominal.| Huesos fuertes. La actividad física no solo reduce la pérdida de flexibilidad en las articulaciones sino que permite mantener unos huesos fuertes y saludables.| Menos caídas. En edades avanzadas el ejercicio es fundamental porque mejora y mantiene las habilidades y destrezas físicas evitando y reduciendo caídas y accidentes.| Más memoria. El sedenterismo no solo afecta al físico, también tiene perjuicios psicosociales. Así, por ejemplo, la práctica regular de actividad física mejora el rendimiento cognitivo de las personas, es decir, permite más concentración, memoria, coordinación neuronal...| Se duerme mejor. Cuando se hace ejercicio se mejora la calidad del sueño, según los expertos.| Más autoestima. Practicar con frecuencia actividad física aumenta la sensación de bienestar y satisfacción con la propia imagen personal y además, sobre todo entre la gente mayor, aumenta la socialización porque propicia conocer personas nuevas y aumenta la autonomía personal.| Menos ansiedad. Los efectos llegan incluso a nuestro bienestar psicológico. La práctica de ejercicio reduce los síntomas de la ansiedad y la depresión.
