El escenario negro de la accidentalidad viaria son las carreteras convencionales. Más del 90% de los siniestros de tráfico mortales ocurridos en Galicia se producen en este tipo de vías. Para tratar de concienciar a los conductores de la peligrosidad de circular por estas vías como si fueran autopistas o autovías, hablar por teléfono al móvil o viajar sin cinturón de seguridad, Tráfico puso en marcha la semana pasada una campaña especial de vigilancia en las secundarias.

¿El resultado? Más de 73.000 vehículos controlados en la red viaria gallega, de los que un total de 2.962 fueron sancionados por pisar más de la cuenta el acelerador, ponerse al volante con una copa de más, hablar por teléfono, enviar un mensaje o viajar con el vehículo en mal entrado, entre otras infracciones. O lo que es lo mismo, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Galicia denunciaron a una media de 17 conductores cada hora, lo que supone un total de 423 diarios.

La jefa de Tráfico en A Coruña y coordinadora de los centros territoriales de Galicia, Victoria Gómez Dobarro, advertía en una entrevista el fin de semana a este periódico de la necesidad de homogeneizar las múltiples señalizaciones de velocidad en las carreteras convencionales la comunidad, que en ocasiones hacen perder el norte al conductor y que no sepa en qué tramo de vía se encuentra. Una vez entre en vigor la limitación de 90 km/h en las vías secundarias, la responsable de la DGT en Galicia defiende que se acometa "una adecuación en cascada del resto". "Son los técnicos los que lo determinarán si al alza a o la baja, pero no necesariamente tendría que ser una revisión a la baja", destacó Gómez Dobarro.

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La provincia de A Coruña concentró durante la campaña de vigilancia en las vías convencionales la mayor tasa de infractores: el 5,35% de los conductores controlados fueron denunciados. En total tendrán que hacer frente a una sanción un total de 1.133 automovilistas interceptados las semana pasada en carreteras de la provincia de A Coruña. Casi el 5% de los turismos cometidos a control en Ourense (354 de un total de 7.234) tendrán que hacer frente al pago de una multa por infringir alguna norma de Tráfico. En el caso de Pontevedra, hasta un total de 1.178 conductores fueron denunciados por las patrullas de la Guardia Civil, lo que supone el 3,4%. En el caso de Lugo fueron 297 los denunciados (el 3% de los controlados en la provincia).

Más de la mitad de las denuncias interpuestas fueron por exceso de velocidad. Le sigue en el ranking la falta de cinturón de seguridad (6,53%), las deficiencias técnicas del vehículo (5,87%) y los positivos por alcohol (4,95%). Las menos representativas fueron no respetar los ceda el paso (0,21%).

En una semana fueron sancionados casi 3.000