Los conductores que transitaban ayer, sobre las 9.15 horas, por la AP-9 se llevaron un importante susto al encontrarse en su camino con tres caballos que accedieron al vial y que circularon entre la zona de Herbón, en el municipio de Padrón, hasta el área de servicio que se encuentra antes de la salida sur de Compostela. Fueron los propios conductores de los vehículos los que acabaron obligando a los caballos a circular en la dirección correcta, para evitar accidentes, y los condujeron hasta el área de servicio sanos y salvos, donde fueron interceptados por agentes de la Guardia Civil y entregados a su propietario.

Según los datos facilitados por la Guardia Civil de Tráfico, los tres caballos accedieron a la AP-9 a través del peaje de Padrón, a donde llegaron porque su propietario, que los llevaba a una finca cercana a pastar, se resbaló por un barranco y asustó a los animales, lo que provocó la estampida de los mismos y su huida hacia la autopista.

Nada más acceder al vial, entre los conductores que se encontraron con ellos estaba un vecino de Vilanova de Arousa, que condujo a uno de los equinos durante varios kilómetros hasta dejarlo en un área de servicio, decisión que también adoptaron otros conductores para evitar que pudiesen sufrir un accidente. La velocidad de los tres caballos, unido a que circularon durante todo el trayecto separados (prácticamente con un kilómetro de distancia entre cada uno) ralentizó de forma espectacular el tráfico en sentido Santiago de Compostela, lo que provocó numerosas retenciones. Finalmente, los caballos esperaron a ser recogidos por su propietario en el área de servicio.