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La rebaja fiscal en sucesiones será de 39 millones y casi se duplicará en 2017

La recaudación de impuestos crecerá en casi 200 millones - El conselleiro de Facenda defiende unos presupuestos expansivos pero no electoralistas

La Xunta prevé recaudar 138 millones de euros en 2016 por el impuesto de sucesiones. Son 39,1 millones menos que en 2015 y no los 70 millones menos anunciados un día antes desde el Ejecutivo autonómico como resultado de eximir del pago del impuesto a las herencias inferiores a 400.000 euros, lo que beneficiará al 99% de los herederos. ¿Por qué? La Consellería de Facenda explica que el impacto total de la rebaja no se notará hasta 2017, pues en el primer semestre de 2016 aún se abonarán herencias correspondientes a 2015 y a las que no se les aplicarán las bonificaciones de 2016.

La rebaja en el impuesto de sucesiones no es la única anunciada por la Xunta para el próximo año. Los descuentos del IRPF ahorrarán a los gallegos 60 millones de euros y además Facenda ingresará 10 millones de euros menos al eximir del pago del Impuesto de Transmisiones a las operaciones de compra-venta de fincas rústicas o ampliaciones de explotaciones agrarias.

Los descuentos fiscales que impulsa la Xunta son posibles en parte porque prevé en base a un mejor comportamiento de la economía una mayor recaudación vía impuestos. El proyecto de presupuestos para 2016 avanza que los ingresos por impuestos directos crecerán un 8,6% (174,4 millones de euros más) y los indirectos experimentarán un incremento del 4% (125,3 millones de euros más). En cambio, bajará la partida de tasas y precios públicos un 1,6% (2,9 millones menos).

La Xunta espera que aumente la compra de viviendas y así prevé ingresar 23 millones de euros más por el impuestos de transmisiones y actos jurídicos documentados, aunque pierda 10 millones por las bonificaciones del rural. Y aunque calcula que los gallegos se ahorrarán 60 millones con las nuevas rebajas del IRPF, por este impuesto da por hecho que ingresará más. Exactamente 98 millones hasta superar los 1.873 millones de euros. También ingresará 3,9 millones más por el impuesto de hidrocarburos, conocido popularmente como céntimo sanitario y que encarece el llenado de depósito.

Ante las críticas de la oposición que consideran la rebaja fiscal un anuncio electoralista, el conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, defendió ayer que los ingresos que estiman los presupuestos de la Xunta para 2015 "son ciertos" y que su departamento ha hecho los cálculos de manera "ultraprudente". "No presupuestamos pintando determinados ingresos", aseveró.

Sobre la reducción de impuestos, en concreto, comentó que era "una promesa electoral" del PPdeG, pero que "también tiene un componente de política económica". "No" es un presupuesto expansivo por la coincidencia con la cita con las urnas y añadió: "Se iba a estar en año electoral fueran o no expansivos".

"Somos tan aburridos que somos hasta previsibles", bromeó el conselleiro, en la presentación de las cuentas en el Parlamento de Galicia. Así, ante la presencia de todo su equipo, y en respuesta a las preguntas de los periodistas, afirmó ser "aburrido hasta decir basta". "No creo que yo sea la alegría de la huerta", ironizó.

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