En la inspección del cadáver de la niña, encontrado en la madrugada del 22 de septiembre de 2013 en la pista de Feros, la luz forense permitió detectar una mancha en la cara de la pequeña ,entre la nariz y la frente (hasta el cabello), con un aspecto "punteado blanquecino". Se mandaron a analizar varios hisopos para comprobar de qué sustancia podía tratarse esa especie de puntos sobre la piel.

Según los expertos del Instituto Nacional de Toxicología habría restos orgánicos e inorgánicos, con contenido de mica, aceites vegetales y material proteico de origen vegetal. Puede tratarse, según los expertos "de un aceite de origen vegetal", habitual en cremas de aseo de cuidado personal y en productos cosméticos. Podría estar mezclado con restos de tierra, teniendo en cuenta la exposición del cadáver en el talud de la cuneta.

En cuanto a la absorción de los medicamentos, los expertos explicaron que el cuerpo de Asunta, en el momento del fallecimiento, presentaba Lorazepam en sangre pero también en el estómago y estaba empezando a expulsarlo a través de la orina. Aprovecharon los peritos para recordar que son las tres fases que se dan en el consumo de cualquier fármaco, primero se absorbe, después se metaboliza y como última etapa se elimina.