El cierre la pasada semana de la instrucción del accidente de Angrois, que deja al maquinista del Alvia como único imputado por el accidente en el que murieron 80 viajeros, sigue sumando reacciones en contra. La última es la de Apafas, la asociación de perjudicados por el descarrilamiento del tren en Santiago, hace más de dos años que agrupa a 40 víctimas, que ha presentado un recurso contra el cierre de la causa en el que asegura que existen hechos que "derivan en una responsabilidad objetiva, causal e inmediata y con relevancia penal" de cargos del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif).

En el documento, las víctimas consideran que el cierre, notificado por el juez Andrés Lago el pasado miércoles, "vulnera el derecho a la tutela judicial efectiva y el derecho a la práctica de prueba", ya que el magistrado rechazó numerosas diligencias solicitadas por las partes.

El texto, al que ha tenido acceso Europa Press, advierte de un "quebranto del principio de congruencia", ya que Lago tacha de "inútiles e innecesarias" las pruebas pedidas por las víctimas, al mismo tiempo que observa "serias discrepancias" en los informes periciales aportados por tres expertos designados judicialmente. El recurso critica que estas demandas fueron denegadas "tardíamente" y que esta respuesta "genera indefensión".

Sobre los informes periciales, lamenta que valorase los de José Manuel Lamela y Juan Carlos Carballeira, "designados a través de la Xunta" y, el de este último, conteniendo "plagios" de otro informe de la CIAF, según denunció el abogado del maquinista en su recurso.

Apafas censura que, en cambio, el que resulta "criticado" por el juez sea precisamente el de César Mariñas, quien "gozaba de una más que dilatada y contrastada experiencia en el ámbito ferroviario".